El aumento de viviendas en casa prefabricadas, sobre todo en Lajares, muchas de ellas sin licencia o en terrenos protegidos, ha llevado al Ayuntamiento de La Oliva (Fuerteventura) a anunciar que tomará medidas y advertirá a sus dueños para que las retiren, de manera inmediata, ante el impacto ambiental que producen.
Desde el Consistorio han señalado, en un comunicado, que en los últimos años se ha producido un aumento significativo en el número de casas prefabricadas construidas en contenedores, generalmente situadas en zonas sin licencia o terrenos protegidos.
Este problema afecta especialmente al pueblo de Lajares, donde se encuentran la mayoría de los contenedores ilegales, pero se está extendiendo a otras localidades del municipio.
La concejala del área de Disciplina urbanística y medioambiental, María del Carmen Cabrera, ha señalado que se pretende “hacer desaparecer todas estas instalaciones porque causan impacto medioambiental y visual y afean al municipio”.
Además, ha recordado que “va en contra la Ley del Suelo, que establece que están sujetos a previa licencia urbanística los actos de construcción y de uso del suelo, citando de manera particular la ubicación provisional o permanente de edificaciones y construcciones prefabricadas e instalaciones similares”.
A pesar de la legislación, la mayor parte de estos contenedores no cuentan con una licencia concedida por la oficina municipal de Urbanismo, ni con una autorización del propio dueño del terreno o, incluso, se localizan en zonas de especial protección para las aves.
“Cosa distinta son aquellos contenedores que se utilizan de manera temporal para el almacenamiento de herramientas aparejado a la construcción de una vivienda, en ese ese caso, lo que cabe es regularizar esa instalación temporal”, ha concluido Cabrera.