El paisaje histórico de Gran Canaria ha destacado por ser el de una tierra rica en bosques y vegetación. Sin embargo, esa estampa se ha transformando en los últimos siglos a raíz del avance de la agricultura y de la industria maderera y del carbón que han dejado los campos desolados de flora. Además Gran Canaria es la isla más deforestada y que menos se ha reforestado en comparación con el resto del Archipiélago. En Tenerife se han plantado 12.000 hectáreas mientras que en Gran Canaria han sido 7.000. Ante este panorama se pueden aventurar consecuencias perjudiciales para la isla.
Pero el daño es evitable. Tenesor Sánchez ha gestado un movimiento ciudadano, Reforestar Gran Canaria, que tiene la misión de repoblar 62.000 hectáreas en un periodo de entre 10 y 15 años con fondos públicos y privados y que pueda aplacar los efectos del cambio climático. En palabras de Sánchez, el objetivo es, a largo plazo, convertir Gran Canaria en un laboratorio verde y de adaptación a las alteraciones del clima que asegure el agua para el futuro.
La reforestación supondría, según la organización, la creación de 1.000 puestos de trabajo estables durante 15 años y 5.000 indirectos durante el mismo periodo. Se lograrían entre 20 y 60 millones de euros en materias primas y 60 millones de euros más en agua cada año.
Unas montañas cubiertas de verde, surcadas de bosques y rebosante de árboles mejorarían el bienestar de la sociedad. Sánchez recuerda los informes de la Organización Mundial de la Salud (OMS) que reflejan que el contacto con la naturaleza es positivo para la salud de las personas.
Reforestar Gran Canaria no sería un gasto sino una inversión, considera el impulsor del proyecto. El coste total sería de 300 millones de euros, “lo mismo que cuesta un Jumbo 747”, subraya Sánchez, y se desarrollaría a lo largo de 10 o 15 años, pues el desembolso no se haría de golpe. Las posibilidades de financiación son diversas. Si los cabildos y ayuntamientos destinaran un 1% de los presupuestos al proyecto, se generarían 10 millones de euros para reforestar. Otra de las opciones sería la aplicación de la ecotasa de un euro por turista, que sumaría 5 millones de euros al año y además, se podría acudir a los fondos europeos destinados a estas actividades.
Tenesor Sánchez ha comenzado a tener contactos con la clase política con el objetivo de comunicar esta iniciativa. El alcalde de Agüimes y candidato de Nueva Canarias al Cabildo de Gran Canaria, Antonio Morales, ha sido el primero en mostrar su interés y ya se ha reunido con el movimiento.