Las irregularidades en las cotizaciones a la Seguridad Social de profesionales sanitarios no se limitan al Hospital Insular Materno Infantil de Gran Canaria. La delegación provincial de Trabajo y Seguridad Social de Las Palmas también ha detectado anomalías en la gestión de los complementos de productividad de las nóminas del Hospital Doctor Negrín.
De momento, la inspección ha reclamado a esta gerencia 14.627,26 euros por un desfase entre lo que debió pagar y lo que abonó por este concepto durante los ejercicios 2012, 2013 y 2014 por un grupo de trabajadores que prestan servicio al Gobierno regional tras ser transferidos desde el Cabildo de Gran Canaria.
Según consta en un oficio fechado el 13 de diciembre, el Servicio Canario de Salud también aplicó una fórmula incorrecta a la hora de cotizar los pluses de este colectivo de empleados y, por ello, la Seguridad Social ha extendido otra acta de liquidación, la quinta conocida hasta la fecha por el mismo motivo en Gran Canaria, para cobrar las cantidades adeudadas.
Las otras cuatro corresponden a otros tantos grupos de trabajadores del Hospital Insular Materno Infantil (funcionarios, personal estatutario temporal, profesionales de actividades hospitalarias y provenientes del Instituto Nacional de Salud). En total, 3.476 empleados y una reclamación que asciende a 1,5 millones de euros.
La investigación, abierta a raíz de la denuncia presentada en noviembre de 2015 por La Casa del Funcionario, un colectivo de trabajadores públicos vinculados al ámbito sanitario, sigue su curso y trata de determinar si estas irregularidades también afectan a las bases de cotización de los otros tres colectivos del Hospital Doctor Negrín que están siendo analizados, el personal estatutario temporal, los funcionarios y los médicos internos residentes (MIR).
Se trata, en todos los casos, de la misma anomalía, según los documentos a los que ha tenido acceso Canarias Ahora. Durante los periodos investigados, las gerencias de los dos hospitales públicos de la isla de Gran Canaria ingresaban de una sola vez, en marzo, los denominados complementos de productividad variable, que premiaban a aquellos trabajadores que alcanzaran los objetivos marcados al inicio de cada ejercicio presupuestario. El importe de esos pluses se incluía de forma íntegra en las bases de cotización del mismo mes, dando lugar a la anomalía por la que ahora el Servicio Canario de Salud debe devolver las cantidades que reclama la Seguridad Social, puesto que se debió prorratear durante todos los meses del año natural.
Este error en la gestión de las nóminas modifica las bases de cotización mensual de los trabajadores e influye tanto en el cálculo de las cantidades que deben abonar empresarios y empleados a la Seguridad Social como en las prestaciones que puedan tener derecho a percibir en un futuro los profesionales sanitarios, ya sean por desempleo, incapacidad o jubilación.