Podemos reclama al Cabildo de Tenerife que se manifieste sobre la posible incompatibilidad para el puesto del recién elegido director artístico de TEA
El partido Podemos, en la oposición en el Cabildo de Tenerife (donde posee cinco consejeros), acaba de reclamar por escrito y a través del registro al director insular de Cultura de esa Administración insular, José Luis Rivero, que se manifieste con claridad acerca de la polémica desatada por el supuesto nombramiento irregular de Gilberto González como director artístico del museo TEA Tenerife Espacio de las Artes.
De los ocho aspirantes a ese puesto en el concurso público que TEA abrió el 8 de marzo de este año (entre los que está el elegido, Gilberto González), al menos dos han impugnado el proceso de selección por la supuesta existencia de múltiples irregularidades, algunas de ellas aparentemente muy graves.
Esa entidad pública del Cabildo de Tenerife tiene un consejo de administración que preside el titular de la Corporación insular, Carlos Alonso (CC), y en él es vicepresidente el actual director de Cultura en Tenerife y exgerente del Auditorio de Tenerife, José Luis Rivero (también de CC).
En el día de hoy, miércoles 5 de julio de 2018, además se ha podido comprobar que la dirección de TEA, con José Luis Rivero al frente, no está muy a favor de la transparencia, afirmación que se apoya en el hecho de que ya no se pueda acceder a toda la información sobre el concurso público que hace unos días sí estaba disponible en la web oficial del museo, tanto las bases del concurso como el acta de la comisión técnica calificada de independiente. Toda esta información se incorpora adjunta a esta misma información periodística.
El hecho de haber roto los enlaces a esa información pública demuestra que el Cabildo de Tenerife no está muy interesado en que se hable de este polémico asunto.
En el escrito dirigido a José Luis Rivero por el actual miembro de Podemos en el consejo de administración de TEA, Julio Concepción (este reemplazó a Roberto Gil-Hernández tras dejar su acta de consejero insular para atender servicios de su partido en Madrid), se afirma que esa formación política quiere “saber si se hubiera incurrido en incompatibilidad alguna para acceder a dicho cargo [por parte de Gilberto González] debido a su condición de consejero no capitular en TEA para el mandato 2015-19 y por no haber transcurrido dos años” desde su cese en el puesto de consejero en TEA (26 de octubre de 2016) y su posterior nombramiento como director artístico (5 de junio de 2018).
Mucho menos tiempo hubo entonces entre esa salida del consejo de administración de TEA de Gilberto González, en octubre de 2016, y su designación posterior por concurso, esta vez en 2017, como director de la bienal Fotonoviembre, iniciativa que depende de TEA y cuyo proceso de selección también fue muy criticado, aunque eficazmente silenciado. Gilberto González es amigo del actual gerente de TEA, Jerónimo Cabrera Romero, y han trabajado juntos en el ámbito de la cultura, por ejemplo en el Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife.
Ese puesto en Fotonoviembre Gilberto González lo compatibiliza en la actualidad con el de director artístico de TEA, según han confirmado los servicios de comunicación de este museo público. Este mismo gabinete, al que se le solicitó la opinión de los gestores políticos de TEA sobre lo ocurrido, se limitó a decir que “no hay valoración mientras este procedimiento administrativo se esté estudiando por los abogados”.
Tal y como se recoge en el documento de petición de información oficial de Podemos, con registro de entrada de 27 de junio pasado, la supuesta incompatibilidad de Gilberto González puede estar avalada por lo recogido en las propias bases del concurso público para la elección de tan relevante puesto en TEA y por lo dictado en la Ley 53/1984. En ambos casos se plantea que los “aspirantes deben no estar incursos en las prohibiciones e incompatibilidades para contratar con el sector público”, algo que los dos recurrentes sostienen que no se cumple en el caso de Gilberto González. Así por lo menos lo desarrollan en sus escritos de impugnación de tal elección final, documentos que también han sido preparados por abogados.
Hay que decir que a la decisión de elegir a Gilberto González como director artístico de TEA por tres años y hasta dos más con previas prórrogas (o sea, cinco posibles), se opuso el consejero de Podemos en TEA, Julio Concepción, que no firmó el acta. Ocurrió en la sesión celebrada el 5 de junio pasado. En la votación sobre la conclusión anterior adoptada por la Comisión Internacional de Valoración Independiente, la luego elevada al consejo de administración para su aprobación definitiva, el representante de la misma fuerza política se abstuvo.
El lagunero Gilberto González ganó el concurso con el proyecto Principio de incertidumbre. El nuevo director artístico de TEA cobrará, según recogen las bases, 55.000 euros brutos por año, hasta un máximo de cinco (tres más dos, estos por la vía de la prórroga). A estas cantidades hay que sumarle las que ya recibe en su condición de director de Fotonoviembre. Ambos servicios se abonan como asistencias profesionales, o sea, como empleos por cuenta propia.