Docentes, catedráticos, historiadores del arte, artistas, comisarios o directivos de museos internacionales, entre otros profesionales, se han sumado al rechazo a la instalación en Santa Cruz de Tenerife de una sede del Museo Rodin de París, un centro que albergará réplicas de obras del artista francés, que nunca tuvo ningún vínculo con la isla, y que supondrá un coste de más de 16 millones de euros. El Ayuntamiento de la capital tinerfeña desoyó este lunes las voces profesionales críticas con el proyecto, así como a los partidos de la oposición, y aprobó el desembolso a la entidad parisina basándose en un informe que ha sido calificado de “fantasioso”, ya que arroja cifras de visitantes e ingresos superiores incluso al museo parisino, que sí tiene las obras originales del artista.
Además de reunir firmas en contra de este proyecto (que suman ya más de 2.500), profesionales del arte han publicado este martes una carta abierta contra el Museo Rodin en Tenerife, que reproducimos íntegramente a continuación:
“Las personas que firmamos esta carta, profesionales de la cultura y/o interesadas en esta, queremos expresar nuestra alarma por la injustificable y costosa decisión de invertir más de 16 millones de euros en lo que se ha dado en llamar un ”museo“ Rodin en Santa Cruz de Tenerife. Una operación que, de hecho, no esconde más que la compra de una serie de reproducciones del escultor francés autorizadas por el museo que lleva su nombre en París.
Tal y como se ha señalado repetidamente, esta operación se ha justificado en base a un estudio económico exento de rigor, que ofrece unas estimaciones del retorno económico del museo tan exageradas que resultan fantasiosas. Una estimación más realista y atenta al sector, tendrá que asumir que se tratará de una inversión a fondo perdido y que la institución resultante requerirá de repetidas inversiones para permanecer abierta. Además, dado que no existe relación alguna entre Santa Cruz de Tenerife y la figura de Rodin, dicha inversión no contribuirá a la construcción de un reclamo turístico coherente. Entendiendo así que no existen argumentos económicos que justifiquen esta operación, nos centramos aquí en refutar su supuesto valor cultural.
– Un museo no es una serie de reproducciones de esculturas. Un museo requiere un plan museístico serio que determine su función patrimonial, investigadora, educativa y sobre todo, su función social en relación al contexto en el que se inscribe. No sólo no ha habido ningún intento por parte del Ayuntamiento de elaborar un proyecto museístico en este caso, sino que ningún especialista justificaría la relevancia de este museo para la Ciudad.
– El elevadísimo presupuesto que se pretende destinar a la compra de estas esculturas es totalmente desproporcionado en relación a los presupuestos anuales que el Ayuntamiento ha destinado a cultura históricamente. Sin duda, en un momento de crisis económica global este enorme gasto tendrá un efecto negativo sobre el tejido cultural de la Ciudad, no sólo yendo en detrimento de instituciones culturales mucho más enraizadas en ésta, sino impidiendo también la aparición de nuevas iniciativas con más sentido y calado social.
– El Museo Rodin de París ha declarado abiertamente su intención de superar la crisis económica causada por el Covid aumentado el número de esculturas que pone a la venta y abriéndose a “mercados emergentes”. Huelga decir que cuantas más reproducciones y más “museos Rodin” circulen por el mundo, menor será el atractivo y valor de éstos. Santa Cruz de Tenerife merece algo más que el gesto provinciano e ignorante de intentar “comprar” su imagen cultural con una franquicia. El ayuntamiento demuestra con este gesto su falta de respeto por la cultura local en particular y la producción artística contemporánea en general, denigrando la imagen de ambas para proyectarnos como una ciudad incapaz de producir una cultura propia.
– El Musée Rodin de París está actualmente embarcado en un juicio que podría forzarle a devolver los escaneados 3-d de las esculturas que aloja en el dominio público. Es decir, es posible que, si pierde el juicio, unas esculturas por las que el Ayuntamiento de Santa Cruz pretende pagar 16 millones de euros puedan ser producidas por cualquiera sin necesidad de pagar una licencia.
En síntesis, Santa Cruz merece mejores infraestructuras culturales, pero el supuesto museo Rodin no es tal cosa, sino un costosísimo capricho político que dañará irremediablemente tanto la capacidad de apoyar el tejido cultural de la Ciudad como la imagen cultural de ésta en el exterior. Creemos que una inversión así no puede imponerse por la voluntad única de un alcalde cuando la oposición pública es tan sonora y los argumentos a su favor tan endebles. Exigimos la paralización inmediata de este disparatado proyecto“.
ALGUNAS FIRMAS DESTACADAS (orden alfabético)
– Aimar Arriola, comisario de arte independiente, Bilbao.
– Juan Albarrán, profesor de Historia y Teoría del Arte, Universidad Autónoma de Madrid
– Adrián Alemán Bastarrica, profesor de Bellas Artes, Universidad de La Laguna
– Teresa Arozena, profesora de Bellas Artes, Universidad de La Laguna
– Antonia Bacallado, Artista, Tenerife
– Selina Blasco, profesora de Historia del Arte, Facultad de Bellas Artes, Universidad Complutense de Madrid
– Manuel Borja-Villel, director del Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, Madrid
– Miguel Cereceda, profesor de Estética en la Universidad Autónoma de Madrid
– Ramiro Carrillo, profesor de Bellas Artes, Universidad de La Laguna
– Jesús Carrillo, profesor de Historia del Arte, Universidad Autónoma de Madrid
– Rosa Castells, museóloga e historiadora del Arte
– Federico Castro Morales, catedrático de Historia del Arte, Universidad Carlos III de Madrid.
– Carmen Cólogan, artista, Tenerife
– Carlos Díaz Betrana, historiador del Arte (responsable de las salas de arte del Gobierno de Canarias)
– Rocío de la Villa, catedrática de Estética, Universidad Autónoma de Madrid
– Concha de Lomba, catedrática de Historia del Arte, Universidad de Zaragoza
– José Díaz Cuyás, profesor, Facultad de Bellas Artes, Universidad de La Laguna.
– Julián Díaz Sánchez, catedrático de Historia del Arte de la Universidad de Castilla La Mancha.
– Maribel Domènech, catedrática de Escultura de la Universidad Politécnica de Valencia y presidenta de la asociación Mujeres en las Artes Visuales (MAV)
– Elvira Dyangani Ose, directora del Museu d’Art Contemporani de Barcelona (MACBA)
– Aurora Fernández Polanco, catedrática de Historia del Arte, Universidad Complutense de Madrid.
– Olga Fernández López, profesora de Historia del Arte, Universidad Autónoma de Madrid
– Pedro Gallego de Lerma, galerista, Valladolid
– Daniel García Andújar, artista, Barcelona
– Semiramis González, crítica de Arte y comisaria, Madrid
– Javier González de Durana, comisario y profesor de Historia Contemporánea, Universidad del País Vasco
– Yaiza Hernández Velázquez, profesora del Department of Visual Cultures, Goldsmiths, University of London
– Ricardo Huerta, catedrático de Educación Artística, Universitat de València
– Javier Garcerá, catedrático de Pintura, Universidad de Málaga
– Gonzalo González, artista, Tenerife
– Concha Jerez, Artista, Premio Velázquez, 2017
– Jesús Pedro Lorente, catedrático de Museología, Universidad de Zaragoza.
– Rogelio López Cuenca, artista, Premio Nacional de Artes Plásticas 2022
– Eva Lootz, Artista, Premio Nacional de Artes Plásticas, 1994
– Pablo Martínez, investigador del CSIC, Madrid
– José Miguel Martínez Carrión, catedrático de Historia e Instituciones Económicas, Departamento de Economía Aplicada, Universidad de Murcia.
– Maite Méndez Baigues, catedrática de Historia del Arte, Universidad de Málaga
– Antoni Miralda, artista, Premio Velázquez 2018
– Mau Monleón, profesora de escultura, Universidad Politécnica de Valencia.
– Ángel Mollá Román, profesor jubilado de Estética, Universidad de La Laguna.
– Ana Navarrete, artista y profesora de la Facultad de Bellas Artes de Cuenca.
– Pere Reig, programador y gestor cultural
– Sofía Rodríguez Bernis, historiadora y gestora cultural española [directora del Museo Nacional de Artes Decorativas en Madrid]
– María Ruido, artista y profesora de Bellas Artes, Universidad de Barcelona.
– Francisco José Sánchez Montalbán, profesor titular y decano de la Facultad de Bellas Artes, Universidad de Granada.
– Manuel Segade, comisario [director del CA2M, Móstoles, Madrid]
– Lucy Steeds, Senior Lecturer in Art, Edinburgh College of Art.
– Isabel Tejeda, catedrática de Bellas Artes, Universidad de Murcia
– Vicente Todolí, comisario de arte y ex-director de la Tate Modern, Londres.
– Carmelo Vega, profesor de Historia del Arte, Universidad de La Laguna
– Juan Pablo Wert, profesor de Historia del Arte, Universidad de Castilla La Mancha.
– Claudia Záldivar, directora del Museo de la Solidaridad Salvador Allende, Chile