Después de dos décadas de militancia en el PP, el alcalde de Arafo, José Juan Lemes, ha decidido abandonar el partido y crear una nueva formación que llevará por nombre Agrupación de Independientes de Arafo, con la que concurrirá, como cabeza de lista, a las próximas elecciones municipales con el objetivo de revalidar su cargo en el Consistorio tinerfeño.
Lemes, que precisó que ya llevaba mucho tiempo meditando dar este paso, aclaró que “ha sido definitivamente esta semana cuando se ha decidido.
De hecho, aseveró que “esta misma mañana me reuní con el grupo de Gobierno municipal para comunicárselo y también he presentado mi dimisión como militante del PP hace unas horas”.
Del mismo modo, agregó que tiene previsto terminar este mandato, al tiempo que argumentó que “un motivo más para decidirme ahora es que estamos en la recta final y que las decisiones y acuerdos trascendentales que pudieran afectar o influir negativamente en el devenir diario de la vida municipal hasta la convocatoria de elecciones, están completeamente salvaguardados”.
En cuanto a su nueva formación política, detalló que “en esta semana se está formalizando su constitución” y resaltó que ha invitado a todos los miembros de su equipo de gobierno a que se sumen al proyecto, para lo que les ha dado de plazo hasta el lunes.
De hecho, los concejales Rosendo Batista, Rubén Marrero, Juan Ramón Martín, Vanessa Flores y Elsa Marrero ya le han expresado su apoyo e, incluso, le acompañaron en la rueda de prensa en la que oficializó su salida del PP.
Todos ellos, según apuntó, “han solicitado ya su reconocimiento como concejales no adscritos”, de lo que se desprende que ninguno de ellos contempla la opción de presentar la renuncia a su acta de concejal.
A su vez, y ante la hipotética situación de ingobernabilidad en caso de que no obtenga los respaldos suficientes por parte de sus compañeros de Gobierno, enfatizó que “ese escenario no me lo he planteado”, pero, arguyó que, “si se produjera esa circunstancia ya me plantearía qué hacer a partir del lunes”.
Igualmente, Lemes hizo extensivo este ofrecimiento “al resto de compañeros de la oposición en Arafo, para que se olviden de personalismos políticos y se sumen a este proyecto pensado exclusivamente para y por Arafo”.
No en vano, manifestó que “en este partido que nace hoy vamos a acoger todas los ideales políticos”. Así, apostilló que “si ya en 2011 en mi equipo habían personas que no pertenecían al PP, pero que se unían a una causa común, ahora, cuatro años después, y sin estar encorsetados en esas siglas políticas, invito a que participe en este proyecto todo el que lo desee”.
Además, destacó que “nosotros hemos tenido una exquisita relación con casi la totalidad de las fuerzas políticas que conforman el pleno municipal”, con lo cuál consideró que este nuevo proyecto también puede ser “atractivo” para algunos de los miembros de la actual corporación, independientemente de su filiación política.
También invito al resto de vecinos a que se sumen a esta iniciativa y avanzó que “en breve comunicaré la apertura de una sede donde ellos puedan transmitir sus inquietudes y sugerencias”.
José Juan Lemes, que incidió en lo complicado que le ha resultado dar este “trascendente paso” , recalcó que “para mí habría sido mucho más cómodo seguir bajo el paraguas del PP. Soy muy consciente de que fuera de una organización política como esa es difícil trabajar, pero a mí no me da miedo el trabajo”.
El alcalde arafero, justificó su marcha del PP “principalmente por el desencanto por las políticas nacionales del partido de Mariano Rajoy y por cómo han afectado en estos casi cuatro años de mandato a mi municipio”.
Al respecto, comentó: “Me duele decirlo, pero Arafo comenzó su andadura en 2011, con los uno de los peores pronósticos económicos y un lastre de más de siete millones de euros en deudas, cantidad que superaba el presupuesto de ingresos de todo el año”.
En este contexto, declaró que entendía que “la llegada del PP al Gobierno central, parecía significar la ayuda que tanto necesitaba, pero me equivoqué, porque el PP me tuvo a mí desde 1995, pero yo apenas pude contar con el PP cuando más lo he necesitado”.
Así, después de enumerar con detalle todas las acciones que acometió para tratar de sanear las cuentas del Ayuntamiento, y lamentar las imposiciones que procedían desde Madrid, afirmó que, “exceptuando los momentos puntuales en los que algunos compañeros de partido me atendían, aunque fuese en el aeropuerto, en los pasillos del Parlamento o en la cafetería del Congreso, aprovechando el poco tiempo que tenían,el resto del tiempo me sentí sólo, capitaneando un barco que amenazaba con irse a la deriva”.
Sin embargo, defendió que, a pesar de todas estas trabas, Arafo ha conseguido cumplir con la regla de gasto y con el objetivo de estabilidad presupuestaria, según se refleja en los informes remitidos desde el Ministerio“.
Esto demuestra, a su juicio, que “nos estamos recuperando. Hemos tenido acierto en la gestión, pero sólo gracias al esfuerzo y sacrificio de los vecinos, también a la solidaridad de los funcionarios y al empeño de este alcalde y su grupo de Gobierno”. Por lo tanto, subrayó que “no es momento para que el PP se vanaglorie de estos logros”.
“No tengo respuesta para aquellos que me preguntan qué ha hecho el PP por Arafo”, ahondó. Es más, aclaró que “el PP no ha entendido la singularidad de Arafo y durante mucho tiempo los dirigentes populares lo único que me enviaban eran los comunicados internos del partido ante aquellas reformas o leyes a nivel nacional que han sido polémicas para que nosotros desde el ámbito municipal apaciguásemos a la ciudadanía, poco más. Sin embargo, tengo que decir que en muchos casos no he estado de acuerdo y, mucho menos, he defendido estos planteamientos”.
Por lo tanto, dijo que “no he sido y tampoco seré marioneta de nadie. Todo se simplifica a que sólo puedo defender aquello en lo que creo y yo, cada vez estoy más lejos del ideario del Partido Popular”.
En este apartado, señaló: “Respeto mucho el trabajo de los que han sido mis compañeros del PP hasta este momento, muchos de ellos amigos, y les pido que respeten mi decisión, porque ha sido muy meditada y difícil de tomar”.
Por último, alegó: “No pretendo escándalos, simplemente seguir un camino sin ataduras a estas siglas, basado en la coherencia de ideas y hechos”.
No obstante, al aludir al presidente del PP de Tenerife, Manuel Domínguez, reconoció haberse sentido “ninguneado” en alguna ocasión, y concluyó diciendo: “Pensé que iba a aprender más de él y que él podría aprender de mí, sin embargo no ha sido así”.