Bermúdez deja claro que el Balneario se recuperará para tener otras funciones
El antiguo Balneario de Santa Cruz, que será rehabilitado y ello tendrá un coste de unos cuatro millones de euros para las arcas de la Comunidad Autónoma (al menos en un principio), según anunció este sábado la Consejería de Hacienda del Gobierno de Canarias, no volverá a ser lo que siempre fue hasta su cierre en el decenio de 1970 y su posterior y acusado deterioro: un balneario.
Así de claro lo dejó en la mañana de este lunes el alcalde de la capital tinerfeña, José Manuel Bermúdez, que afirmó que, cuando se concluya el plan de recuperación de ese complejo, hoy en muy mal estado, el uso, como dijo Hacienda, será público, pero como “centro ciudadano” o quizá como instalación para la “atención sanitaria”, pero no con las funciones que tuvo en su momento de balneario de la ciudad, entre otras razones por su ubicación tras el desarrollo portuario de los últimos decenios, lo que ha bloqueado el acceso que antes sí tenía al mar.
Bermúdez se refirió a esta cuestión en una intervención que tuvo esta mañana en Radio Club Tenerife-Cadena SER, en la que no descartó que el futuro proyecto pueda contemplar que haya piscinas. Lo que sí garantizó el alcalde es que no volverá a ser balneario.
El viejo Balneario de Santa Cruz, situado junto a la carretera que une el centro de la ciudad con el barrio de San Andrés y hoy una instalación totalmente destrozada y abandonada, será remozado y recuperado por las Administración autonómica, con inicio de ese proyecto integral este año, más de 12 meses después del primer aviso realizado sobre el particular por la consejera canaria de Hacienda, Rosa Dávila.
Así lo anunció este sábado el Gobierno de Canarias, que, a través de la consejera de Hacienda, Rosa Dávila, dijo que en unos meses saldrá a concurso la primera fase de ese plan de recuperación, la que incluye las obras iniciales de consolidación de la estructura del edificio. El presupuesto de licitación estará en torno a millón de euros.
A esa primera actuación constructiva seguirán otras hasta conseguir que la histórica instalación, que presenta un estado ruinoso, pueda ser recuperada para los santacruceros. La intervención pública en ese complejo social llega tarde, muy tarde, pero ha sido valorada por las autoridades locales y por los vecinos que han defendido su rehabilitación a capa y espada. El viejo Balneario de Santa Cruz, antiguo complejo deportivo y de ocio de la capital, forma parte central de la más reciente historia de la ciudad.
Según recogía esa misma nota, el Gobierno de Canarias sacará a concurso en los próximos meses la contratación de las obras iniciales del Balneario de Santa Cruz con un coste de 1,083 millones de euros, a los que en una segunda o más fases se añadirán al menos otros tres millones.