La Policía Local de Santa Cruz de Tenerife atosiga a los sintecho para que no molesten a los comerciantes de la zona noble de la ciudad

Desde el pasado día 15, los agentes de la Policía Local de Santa Cruz de Tenerife tienen una orden clara de sus superiores: identificar a las personas sin hogar “que deambulan” en la zona comercial del centro de la ciudad porque “molestan a los usuarios de terrazas y comercios”. Así se puede leer en la aplicación telemática por la que se transmiten las órdenes desde la superioridad pero que se refrendaron de forma verbal en los llamados pases de lista. Los jefes de servicio transmitieron a los agentes una instrucción muy concreta: “Que se ahuyente a esas personas de las zonas comerciales”.

La identificación de personas que no han cometido ningún ilícito (ni penal ni administrativo) está prohibida por la Ley de Seguridad Ciudadana, según ha recordado este domingo el sindicato Csif en un comunicado en el que exige al Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife que anule esa orden “por atentar contra la legalidad vigente y los derechos fundamentales” y por “poner a los agentes de la autoridad local como represores de libertades y derechos para satisfacer los intereses económicos de unos particulares como son los comerciantes de la zona centro de la ciudad”.

La decisión del Ayuntamiento, gobernado por Coalición Canaria y el Partido Popular, es consecuencia directa de la reunión que una semana antes de la orden tuvo la concejala responsable del distrito Centro-Ifara, Purificación Dávila, con asociaciones de comerciantes de la zona. En esa reunión, los empresarios le manifestaron su malestar por los niveles de inseguridad que ellos perciben en la zona, concretamente en la señera calle Castillo, columna vertebral del comercio tradicional santacrucero. Según el periódico El Día, en esa reunión los comerciantes hablaron en concreto de personas que entran en los comercios “y destrozan los expositores”, o “amedrentan a mujeres”. No ha quedado constancia de que en esa reunión se haya informado de que se interpusieran denuncias. “No se puede esperar a que un día ocurra una desgracia”, dijeron a la concejala.

Purificación Dávila, de Coalición Canaria, no esperó mucho para poner estas alarmantes afirmaciones en conocimiento de su compañera de Corporación y de partido Gladis de León, responsable de Seguridad, entre otras áreas. La reacción ha sido que desde el pasado día 15 el subcomisario actualmente al frente de la Policía Local (la comisaria está de baja y próxima a su jubilación) transmitió a los jefes de grupo la orden correspondiente. Y en concreto el inspector del grupo operativo, con número de placa 11694, la transmitió a todos los agentes: “Identificación de personas ”sin hogar“ que deambulan en la zona y molestas [sic] a los usuarios de terrazas y comercios”. La orden especificaba los turnos durante los cuales habrían de producirse estas acciones de atosigamiento: entre las tres de la tarde y las nueve de la noche.

No consta ninguna medida de carácter social adoptada tras esa reunión con los comerciantes para resolver o mitigar el problema de las personas sin techo que se encuentran en esa situación no solo en la zona centro de la ciudad. 

No es la primera ocasión en la que el Ayuntamiento de Santa Cruz se ve envuelto en este mandato en una polémica con personas en situación de exclusión o con problemas habitacionales. El pasado mes de agosto procedió al desalojo de un grupo de ellas que acampaba en otra zona de la ciudad, en concreto en el Parque Marítimo, muy cerca del auditorio Adán Martín. Los colectivos sociales se quejaron de la escasa capacidad de respuesta y de recursos del Consistorio, que ya hace tiempo que viene persiguiendo con la Policía Local a personas que se han visto obligadas a pernoctar en sus coches ante la pérdida de sus viviendas y la imposibilidad de acceder a alguna por su escasez y sus precios. Según Cáritas, más de 2.700 personas duermen al raso en la isla de Tenerife, aunque se trata de una realidad infraestimada, advierten los expertos.

La concejala Purificación Dávila, que asumió las quejas de los comerciantes contra las personas sin techo, es Graduada Social y Técnica Superior en Integración Social, y presume en el currículo que figura en la web del Ayuntamiento de tener “una marcada vocación social”, lo que le ha llevado, según ese mismo texto, a “haber presidido durante diez años la Federación Canaria de Montañismo”. Asimismo, dice colaborar “activamente en innumerables actividades sociales, en la asociación de vecinos y colectivos de jóvenes de su barrio”, El Toscal.

“La indigencia es sin duda un problema de carácter social, nunca policial. No hemos escuchado ninguna declaración al respecto del área de asuntos sociales del Ayuntamiento ante estas instrucciones a los agentes locales, ni ninguna directamente del área de seguridad”, se lamenta el Csif de la Policía Local de Santa Cruz de Tenerife en el comunicado divulgado este domingo. “Son personas con diversos problemas médicos o sociales, y lo último que necesitan es verse perseguidos por la Policía Local por el hecho de tener que vivir en las calles”, concluye.

El Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife está gobernado por un pacto entre Coalición Canaria y el Partido Popular aunque las elecciones las ganó el Partido Socialista. El alcalde es José Manuel Bermúdez, de CC.