El grupo político Arico Somos Todos ha expresado este sábado su rechazo al parque eólico marino cuya instalación está prevista en las aguas costeras de este municipio por los efectos que causaría a los núcleos de Tajao, Las Arenas, La Caleta y Las Maretas, principalmente.
En un comunicado, Arico Somos Todos, que cuenta con dos concejales en la corporación del municipio tinerfeño, avanza que se personará y realizará alegaciones al proyecto, que se encuentra en estos momentos en exposición pública.
Esgrime que Arico está “enormemente afectado” por este tipo de instalaciones ubicadas en su territorio, que lo convierte en “el municipio que aglutina la mayoría de toda Canarias sin que se reciba ninguna contrapartida por soportar dicha situación”.
En cuanto al parque eólico marino, señala que su ubicación “condiciona el desarrollo de una parte muy importante de la costa de Arico y atenta de manera grave” a la continuidad de la pesca artesanal que se desarrolla en Tajao.
“No comprendemos cómo se puede afear un entorno natural para llenarlo de hierros y cables submarinos que tendrán que salir por tierra y conectarse a la red. Esto es una autentico atentado. No lo podemos permitir. Lucharemos con todas nuestras fuerzas”, insiste.
Aparte del impacto paisajístico, advierte de que las aspas de los aerogeneradores pueden causar la muerte o lesión de aves, mamíferos y tortugas marinas que se acercan o pasan por la zona del parque eólico.
Y añade que el ruido generado por las turbinas y el montaje de las estructuras puede afectar a la comunicación, el comportamiento y la supervivencia de los animales marinos, especialmente los cetáceos.
Asimismo, indica que los vertidos accidentales de combustibles, aceites o metales pesados desde las embarcaciones, la maquinaria o los propios aerogeneradores pueden contaminar las aguas y los sedimentos, y dañar a la flora y fauna marina, y que estas instalaciones pueden destruir o modificar los hábitats y la biodiversidad del lecho marino, así como provocar la resuspensión de sedimentos que afecte a la calidad del agua.
Por último, alega que los campos electromagnéticos generados por los tendidos eléctricos pueden afectar a las especies de fauna marina que se orientan por el campo magnético terrestre, como los tiburones o las rayas, y también a los sistemas de navegación de las embarcaciones.
Arico Somos Todos se compromete a hacer cuanto esté en su mano “para parar este abominable proyecto que se encontrará muy pegado a la línea de costa y que supondrá un impacto de tal magnitud que esos sitios serán irreconocibles”.