La variante ómicron amenaza el éxito de la temporada alta turística en Canarias

Jennifer Jiménez

Las Palmas de Gran Canaria —
30 de noviembre de 2021 21:18 h

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El sector turístico de Canarias vuelve a hablar de “incertidumbre” para referirse a las previsiones de los próximos meses. Su temporada alta, que tradicionalmente comienza en otoño y se prolonga todo el invierno por sus temperaturas más cálidas, comenzó este año con mejor horizonte para lo que resultó 2020 y 2019. El presidente de la Federación de Hostelería y Turismo de Las Palmas, José María Mañaricúa, asegura que la ocupación este otoño ha rozado el 80%, pero que esta pandemia ha demostrado que no se puede dar nada por sentado y que las decisiones que se tomen y las previsiones son cambiantes. De hecho, esta tendencia puede truncarse ante la amenaza de ómicron y el aumento de contagios en multitud de países de Europa, que ya empiezan a endurecer sus medidas para frenar el avance de la variante.

Los datos del Istac correspondientes al mes de septiembre ya arrojaban un mayor número de visitantes extranjeros y peninsulares llegados a Canarias, con 797.652 en total frente a los 1.128.382 de antes de la pandemia, en septiembre de 2019. Además, los datos de la Consejería de Economía y Empleo del Gobierno de Canarias también reflejan en octubre una tendencia positiva en cuanto a la reincorporación de plantilla que se encontraba en ERTE, que descendió en 6.925 personas el pasado mes.

José María Mañaricúa señala que noviembre llenó de esperanza al sector y que se experimentó un incremento en el número de reservas. De momento, no se están detectando cancelaciones para diciembre, pero la situación dependerá de las restricciones que se anuncien en los próximos días en Europa para frenar los contagios. El presidente de la FEHT resalta los buenos datos que ha tenido España y Canarias en cuanto a ritmo de vacunación, aunque anima a vacunarse al porcentaje que aún no lo ha hecho. No obstante, subraya que el problema radica en los momentos en los que la situación no está controlada en los países emisores como Reino Unido.

Contener la entrada del virus

El hotelero sostiene que sí que es una medida positiva que se cuente con un mecanismo de control en las llegadas de visitantes, como el hecho de que se vuelva a solicitar el certificado COVID en los aeropuertos. “Somos el mejor destino de invierno de Europa y a partir de mañana vamos a proceder a mejorar las condiciones de control”, recuerda Mañaricúa. De hecho, a partir de este miércoles el Gobierno de Canarias exigirá a las personas que visiten el Archipiélago que presenten un certificado de vacunación contra la COVID-19, un documento que demuestre haber superado la enfermedad, o bien una prueba diagnóstica negativa.

La medida, que ya estuvo en marcha hasta el pasado mes de septiembre en Canarias, estará ahora en vigor hasta el 15 de enero de 2021, aunque podrá prorrogarse. La norma recoge entre sus condiciones la exclusión de la realización de cribados mediante pruebas diagnósticas de infección activa (PDIA) a los pasajeros menores de 12 años y tres meses que entren en Canarias procedentes del resto del territorio nacional.

En el supuesto excepcional de que una persona no se hubiera realizado la prueba diagnóstica en origen, la Consejería de Sanidad informa en un comunicado que se le realizará en la terminal de llegada; y quienes se nieguen a su realización deberán guardar aislamiento en su residencia durante 10 días, sin perjuicio de las medidas sancionadoras que se pudieran tomar.

Nueva campaña para potenciar el turismo

Desde la Consejería de Turismo del Gobierno de Canarias, que lidera Yaiza Castilla, han explicado que el próximo viernes se presentará en Gran Canaria una nueva campaña de promoción turística del Archipiélago. La principal incertidumbre de cara a diciembre es que se produzca una bajada en el ritmo de reservas debido a las restricciones que se anuncien en mercados emisores; aunque en principio las medidas sobre movilidad no afectarán a las personas vacunadas.

El presidente de la patronal Hotelera y extra hotelera de la provincia de Santa Cruz de Tenerife, Jorge Marichal, por su parte, ha defendido este martes en Radio Club Tenerife que la mayor amenaza a la que se enfrenta el sector en las Islas es la exigencia del certificado de vacunación para los menores de 12 a 16 años. Además, se mostró crítico con el hecho de que los países occidentales hayan preferido dejar que se pierdan dosis de vacunas en sus almacenes en lugar de enviarlas a países más pobres que las necesitan, lo que está produciendo que se generen nuevas variantes.

Preocupación por el sector en La Palma

Ashotel adelantaba hace unos días en un comunicado que el 91% del personal de plantilla de los establecimientos alojativos de la provincia tinerfeña ha salido ya del ERTE. No obstante, la patronal también ha mostrado su preocupación por la situación del sector en La Palma, donde asegura que ha caído la ocupación media en 25 puntos porcentuales hasta el 31%, frente al 56% de media del mes de septiembre debido a la erupción.

Según los datos de la patronal, la estancia media de los visitantes a La Palma en octubre cayó de los 5,13 días de septiembre a los 2,99 días de ese mes, algo que achaca a a la desaparición de la turoperación y a que los visitantes actuales son principalmente turistas de fin de semana, atraídos por la erupción. Una circunstancia que asegura que también ha hecho reducido los ingresos hoteleros, que “han caído de los 2,65 millones de septiembre a los 1,55 días de octubre, según datos de la Encuesta de Alojamiento Turístico del Istac”.

La Palma se enfrenta ahora al reto de encajar el turismo de volcán con un modelo por el que venía apostando desde hacía años, mucho más enfocado al turismo activo y de calidad. Cientos de personas se acercan cada fin de semana en guaguas en excursiones programadas con una empresa de Tenerife. Es un modelo que permite sobrevivir a guías locales, que se encontraban con cero ingresos por el cierre de senderos o el cese de actividades en parapentes. No obstante, otras empresas piden una estrategia que revierta en la economía local de manera más duradera.