Ocho planes para disfrutar de Lanzarote con niños y no aburrirse
Lanzarote es un destino eminentemente familiar. Y viajar en familia requiere de una cuidada planificación para evitar que los niños pierdan el interés y se aburran. Lo más fácil es meterse un atracón de playa o piscina, pero volar hasta una de las islas más bonitas del mundo para quedarse en el hotel o tirado en la arena todo el día pues no es la mejor de las opciones. Lanzarote tiene mucho que ver; y bastante de esas atracciones, lugares y sitios de interés pueden convertirse en toda una aventura para los chiquitines de la casa.
Ninguno de los planes para niños que te mostramos en este listado son eminentemente infantiles. Es más, algunos requieren de ponerle un poco de imaginación para que los enanos y enanas entren al trapo y se lo tomen como una aventura. En otros casos, el sólo hecho de subirse en camello –en realidad dromedarios- o meterse en un submarino para explorar los fondos marinos es ya toda una experiencia que va a despertar la curiosidad y el entusiasmo de los chicos. Otros, creemos, que van a gustar tanto a los papis como a los hijos.
Aqvarium de Lanzarote . (Dirección: Avda Las Acacias, sn –Centro Comercial El Trebol-; Tel: (+34) 928 590 069; Horario: L-D 10.00 – 18.00; E-mail: comercial@aquariumlanzarote.com ) Hasta la fecha es el mayor acuario de Canarias. Cuenta con 33 diferentes ambientes que sirven para hacer un viaje por los principales ecosistemas marinos del mundo. El tanque central cuenta con más de 500.000 litros de agua y nos introduce en los ambientes pelágicos (aguas abiertas) con varias especies de tiburones como estrellas. Un punto interesante para los niños es la recreación de charcos de marea, toda una lección de biología marina que después puedes seguir en la playa con unas buenas gafas y un tubo. A nosotros nos encantan los acuarios y éste está bastante bien montado.
Viajar en submarino . (Dirección: Puerto Calero, sn; Tel: (+34) 928 512 898; E-mail info@submarinesafaris.com) Submarine Safaris parte de Puerto Calero y durante 40 minutos recorre los fondos cercanos al puerto en una inmersión que alcanza los 30 metros de profundidad. Es una experiencia única para los niños que, sencillamente, quedan fascinados. Los fondos de Lanzarote son un verdadero paraíso para la vida marina y no es raro encontrarse con tortugas, delfines y otros moradores ilustres de las profundidades. Y peces a cientos, a miles. No es una excursión barata, pero hay un 15% de descuento si se reserva la plaza en la página web de la empresa. Y merece mucho la pena. No todos los días tiene uno la oportunidad de hacer un viaje en submarino por uno de los fondos más ricos del mundo.
Bajar a las profundidades de la tierra . La Cueva de los Verdes (Dirección: Acceso LZ-204; Tel: (+34) 928 848 484; Horario: Octubre – mayo L-D 10.00 – 18.00 Junio-Septiembre 10.00 – 19.00; E-mail: info@centrosturisticos.com) es un impresionante tubo volcánico que recorre el subsuelo del norte de la isla desde el Volcán de La Corona hasta el mar. Durante siglos, esta cueva fue utilizada por los isleños para esconderse del ataque de piratas e invasores y hoy es uno de los lugares más visitados. Un sendero guiado por el interior de la tierra, complementado con un espectacular sistema de iluminación, permite explorar el lugar. Para los mayores es impactante y para los más pequeños toda una experiencia. Las andanzas por la Lanzarote Subterránea se completan en Los Jameos del Agua (Acceso: LZ-204 (dirección a la costa desde LZ-1); Teléfono: (+34) 928 848 020; Horario: L-D 10.00 – 18.30), tramo inferior del mismo tubo volcánico abierto por un desplome y acondicionado para la visita por el genial artista local César Manrique . Un lago subterráneo con enigmáticos cangrejos blancos y una zona de piscinas son los mayores atractivos para los enanos.
Jugar a los piratas en un castillo de verdad . El Castillo de Santa Bárbara vigila el bonito pueblo de Teguise desde la atalaya del Volcán de Guanapay. Este castillete se construyó en el siglo XVI para proteger la, por aquel entonces, capital de la isla de las incursiones de ejércitos enemigos, corsarios y piratas. Y por esa razón es la sede del Museo de la Piratería (Dirección: Acceso desde Avenida Gran Aldea; Tel: (+34) 928 845 001 y (+34) 686 470 376; Horario: LD 10.00 – 16.00)), que además de ser una buena manera de aprender una parte importante de la historia de la isla, tiene también cuadernos didácticos y actividades especiales para niños y niñas para que la visita, además de instructiva, sea divertida. En la isla hay varios castillos que también pueden visitarse. Ideal para jugar a los piratas.
Subir a un volcán a lomos de un camello . Imperdible. Y no sólo para los chiquitines. El Parque Nacional de Timanfaya es una parada obligatoria en cualquier viaje a Lanzarote que se precie. Este paraje singular es una de las mejores muestras de vulcanismo reciente del mundo. Un lugar dónde las fuerzas que emergen den interior de la tierra aún están presentes y muy vivas. Y visitar Timanfaya ( aquí te dejamos una completa guía del parque ) supone, también, dar un paseo en dromedario desde el Apostadero de los camellos –aunque el lugar se lama así, lo quwe hay en Lanzarote son dromedarios ya que tienen una sola joroba-. El paseo es corto (unos 20 minutos), pero a los niños les encanta y la vista de los volcanes desde lo alto de la loma es impresionante. En septiembre de 2017 el precio era de 6 euros por persona. Después de aquí hay que visitar el Parque Nacional e ir hasta el Islote de Hilario, dónde puedes ver que los volcanes no están, ni mucho menos, dormidos.
Ver peces, peces y más peces con las gafas y el tubo. El esnórquel es algo así como el submarinismo para todos los públicos. Con las gafas y el tubo, los fondos someros de playas y charcones se hacen accesibles para los más pequeños y son el complemento ideal para completar un día de playa. Lanzarote es un verdadero paraíso para la práctica del submarinismo, pero hay que ser cuidadosos a la hora de elegir lugares para que los niños puedan asomarse a la vida marina sin peligro. Nosotros te recomendamos dos lugares. La famosa Playa del Papagayo se encuentra en el sur, es de aguas tranquilas y la cantidad de peces que se acercan hasta la misma orilla es increíble. Otro lugar mágico es el Caletón Blanco, cerca del pueblo norteño de Órzola, un enorme charcón de aguas muy poco profundas y tranquilas dónde los enanos pueden ver multitud de peces sin peligro. Es una de nuestras playas preferidas de Canarias.
Explorar una isla ‘desierta’ . Pasar a la Isla de La Graciosa es otra de las excursiones típicas cuando se planea un viaje a Lanzarote. Y con un poco de imaginación se puede convertir en toda una aventura desde el inicio. No es muy difícil ilusionar a los niños si partimos de la base de que para llegar a La Graciosa hay que hacer una pequeña travesía en barco desde el Puerto de Órzola. Y más allá de El Río –el pequeño canal que separa a ambas islas- está La Graciosa con sus paisajes semi desérticos y sus espectaculares playas. Lo ideal es embarcar a primera hora de la mañana ( ver horarios) y volver a última hora de la tarde para echar todo el día explorando este pequeño paraíso. Pasar una noche ya es un auténtico privilegio –lo decimos por propia experiencia-.
Un lago verde marciano y chorros de agua supersónicos . La costa que rodea al Parque Nacional de Timanfaya guarda alguno de los tesoros más preciados de Lanzarote. Ir hasta el pequeño pueblo de pesadores de El Golfo es una excusa perfecta para comer pescado fresco y disfrutar de la sencilla arquitectura marinera de la isla. Y para mantener la atención de los más chiquitos se puede añadir un poco de emoción a la cosa comentándoles que vamos a ver, a dos pasos del pueblo, un lago de color verde marciano en una playa negra. El Charco de los Clicos , con su verde característico producido por algas, ocupa parte de un antiguo cráter semi hundido que se transformó en playa. Muy cerca se encuentran Los Hervideros, cuevas marinas con aberturas en las que el agua entra con violencia formando espectaculares chorros de agua. Aquí hay que tener a los chicos muy vigilados porque es un lugar dónde es fácil caerse.
Fotos: Viajar Ahora y bajo Licencia CC: Gareth Anderson ; Ian Hughes ; Martyn M ; Aqvarium de Lanzarote.