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Guía de playas nudistas de Ibiza y Formentera

Ibiza es uno de los centros vacacionales más afamados de Europa. Un litoral privilegiado y la que, para muchos, es la mejor oferta de ocio nocturno del mundo son los atractivos más conocidos de una isla que también presume de cultura, gastronomía y el ambiente Chill Out más afamado. El turismo naturista también tiene un hueco en la geografía ibicenca y, sobre todo, en la vecina isla de Formentera, considerada como uno de los paraísos mundiales del nudismo. Viajar Ahora sigue descubriéndote las playas nudistas del litoral español explorando, esta vez, las islas de Ibiza y Formentera.

Junto a la capital de la isla se encuentra Playa Talamanca, uno de los lugares tradicionales del nudismo balear. Esta playa, que se encuentra a espaldas del puerto, cuenta con la ventaja de su carácter de semiurbana lo que implica servicios como duchas, aseos, alquiler de sombrillas y hamacas y, en esta ocasión, acceso para minusválidos. Pero su cercanía a la ciudad (Acceso a través de la Avenida Juan Carlos I) y a alguno de los complejos de ocio nocturno más famosos de Ibiza la convierten en un lugar que, en temporada alta, es multitudinario lo que ocasiona algunos problemas de convivencia.

El pequeño pueblo costero de Es Canar es uno de los grandes centros del naturismo de la isla. Situado a apenas 4,5 kilómetros de Santa Eulalia del Río (acceso a través del Carrer de César Puget Riquer), Es Canar cuenta con las ventajas que brinda cualquier playa urbana; duchas, socorristas, hamacas, sombrillas, fáciles accesos, aparcamiento y una buena oferta hotelera y gastronómica. Esta playa de arenas rubias con más de 350 metros de longitud y una anchura media de 40 metros es el centro de una cadena de pequeñas calas (como Ses Pedrises o Cala Nova) en las que se practica con normalidad el naturismo.

La costa que se extiende al norte de la localidad de Santa Eulalia del Río está marcada por la presencia de acantilados y zonas boscosas que llegan hasta, prácticamente, la orilla del Mediterráneo. Este trozo de naturaleza privilegiada esconde alguna de las calas y playas más auténticas de la isla. Lugares alejados de los grandes centros turísticos que ofrecen tranquilidad y sensación de verdadero aislamiento. La carretera PM-810, que sube desde el centro de Santa Eulalia y la Cala de San Vicente, es la vía que comunica las diferentes playas de este sector donde se practica con asiduidad el naturismo. La primera es la Es Figueral (Acceso a 6,5 km por PM-810) una playa semiurbanizada de más de 400 metros de longitud que cuenta con el distintivo ‘Bandera Azul’ (lo que implica duchas, aseos, socorrista, limpieza, hamacas, sombrillas, restauración, etc). El punto flaco del lugar es la gran cantidad de bañistas que la visitan a diario.

El contrapunto es la Cala de S'Aigua Blanca a la también se llega a través de la carretera PM-810 desde la población de Santa Eulalia (9,4 kilómetros dirección norte y a 3,3 kilómetros de Cala San Vicente) y su entrada está perfectamente señalizada (posibilidad de aparcar). Al litoral, asimismo, se accede a través de una rampa que logra salvar la altura que media entre la arena dorada de la orilla y el tope del acantilado que la guarda del resto de la costa. Esta preciosa playa tiene unos 300 metros de longitud y una anchura que ronda los 30 metros de media. Pese a su carácter aislado, cuenta con servicios como restaurante y despacho de bebidas. Un par de establecimientos hoteleros situados entre los pinares completa el catálogo de servicios. otra de las bondades de este espacio costero del municipio de Santa Eulalia del Río es la tranquilidad de sus aguas.

Otra opción en el litoral oeste ibicenco es Cala Comte. Aunque la playa centras es totalmente textil, algunos lugares de esta costa, dominada por los cantiles y las pequeñas calas, son frecuentados sin problemas por naturistas. Ya en el extremo sur de Ibiza se encuentra la imponente Ses Salines, un arenal de casi un kilómetro de longitud donde es habitual la práctica del nudismo. Su situación en pleno Parque Natural de Ses Salines (un complejo de dunas y humedales que se cuentan entre los más espectaculares del Mediterráneo español) y la inclusión de la playa en el selecto listado de espacios con ‘Bandera Azul’ dan una idea de la calidad medioambiental y del nivel de los servicios que ofrece. El primero el fácil acceso desde la capital de la isla (Ibiza ciudad) a través de la PM-802 y la posibilidad de aparcar el coche sin problemas. A esto hay que añadir aseos, duchas, socorrista, limpieza, y posibilidad de alquilar sombrillas y hamacas. La gran extensión de la playa (a la que también van muchos textiles) permite encontrar lugares con relativa intimidad. Las aguas del lugar son limpias y tranquilas, lo que aumenta el atractivo del lugar. Pasando la Punta de Ses Portes se encuentra otra de las mecas del naturismo balear. El Cavallet también comparte con Ses Salines ubicación y características (se accede por la carretera de El Cavallet un kilómetro antes de llegar a Ses Salines). En este caso la playa cuenta con más de 1.100 metros de arenas rubias y servicios análogos a los de su vecina. El extremo sur de esta playa es un lugar de reunión tradicional del turismo gay.

NUDISMO EN FORMENTERA

La pequeña isla, situada al sur de Ibiza es uno de los paraísos del nudismo a nivel mundial. Todo el litoral es considerado de uso mixto (esto es, para naturistas y textiles). Un lugar mítico para la práctica del naturismo es la aún más pequeña Isla de Espalmador (entre Ibiza y Formentera) a la que se accede en barco desde el puerto de Sa Sabina. La mayor parte de los que visitan la isla se quedan en la Playa de S’Algas, pero merece la pena caminar y visitar otros puntos impresionantes de la costa como Sa Torreta o Cala de Bosch (grande y pequeña), en las que uno puede darse un chapuzón totalmente desnudo mientras explora los encantos de este pequeño islote que puede recorrerse a pie en apenas un par de horas.

Ya en Formentera, uno de los lugares más frecuentado es el enorme arenal de Playa de Migjorn, una gigantesca franja de arenas claras de más de 4.500 metros de largo donde se alternan zonas semi urbanizadas con servicios completos (hamacas, duchas, sombrillas, ect) y otros lugares en los que es posible contar con la intimidad que brinda la soledad; a continuación de esta playa se encuentra Los Arenales (Els Arenals), que suma otros 2,5 kilómetros a su predecesora. Hacer un listado de las playas nudistas de Formentera sería enumerar, una por una, todas las playas de la isla. Por eso recomendaremos las que más nos gustan, como Ses Illetes, en el extremo norte de la isla; la preciosa Cala Saona o la costa de Ses Canyes (en el lado contrario de Migjorn) donde se alternan roquedos bajos y pequeños tramos de arena.