La movilización de las familias ha surtido su efecto. El equipo de Gobierno (PP) del Ayuntamiento de Piélagos ha dado un paso atrás y, finalmente, sí apartará a la empresa Yalmar Eventos S.L. de la gestión del Centro de Educación Infantil 'La Jilguera'. Así se lo ha transmitido este viernes el alcalde del municipio, Enrique Torre, a los padres durante una reunión celebrada en la sede consistorial, y en la que también ha participado la concejala de Educación, Eva Arranz.
Desde la semana pasada, las familias de 'La Jilguera' venían exigiendo a los responsables del Consistorio que tomaran medidas ante las “graves irregularidades” cometidas por Yalmar y ante los desperfectos en la estructura del edificio. Los padres habían puesto en conocimiento de la Administración pública -propietaria del centro- que la empresa estaba vulnerando el ratio exigido por Ley entre educadores y escolares, lo que estaba afectando al correcto cuidado de los pequeños.
Igualmente, denunciaron la falta de recursos materiales y educativos para la correcta realización de las actividades y el incumplimiento de algunas medidas de seguridad, así como deficiencias en el servicio de limpieza e irregularidades en el comedor, donde estaba trabajando una persona sin contrato y que, además, estaba elaborando las comidas en su hogar debido a la caída de parte del techo de la cocina.
A comienzos de la semana, los padres realizaron una recogida de firmas y entregaron al alcalde una hoja de reclamaciones. En un primer momento, los 'populares' descartaron la posibilidad de rescindir el contrato, como reclamaban las familias, y trataron de restar importancia a los hechos. En declaraciones a este diario, Arranz rebajó la gravedad de las denuncias asegurando que más bien se trataban de “inquietudes”.
Sin embargo, apenas cinco días después, el equipo de Gobierno ha cambiado su postura y procederá a rescindir el contrato en los próximos días. Según sus previsiones, será después de las vacaciones de Semana Santa cuando una nueva empresa se hará cargo del centro de forma transitoria, durante los cuatro o cinco meses en los que el Ayuntamiento tarde en resolver un nuevo concurso público. La gestión tendrá que salir de nuevo a licitación, por lo que habrá un plazo para que nuevas empresas presenten sus ofertas.
Durante el encuentro, Torre ha negado que la empresa hubiese dejado de tramitar el seguro escolar a los nuevos inscritos una vez iniciado el curso, tal y como sospechaban los padres, que habían requerido sin éxito los comprobantes.
Por otro lado, personal del Ayuntamiento ha estado trabajando en el centro durante toda la semana para reparar la caída de parte del techo debido a la filtración de agua. A consecuencia de ese derrumbe, ocurrido el pasado mes de febrero, la cocina y el comedor quedaron inhabilitados. Para concluir las obras será necesario esperar a que la climatología sea favorable. Mientras tanto, el Consistorio ha contratado un catering.
Recurso y deficiencias
Con el objetivo de dar respuesta al importante crecimiento poblacional del municipio, el Ayuntamiento de Piélagos hizo uso de los fondos del Plan E para levantar dos centros de educación infantil, uno en Renedo y otro en Boo. Construidas en el año 2011, las instalaciones de 'La Jilguera' no fueron inauguradas hasta marzo de 2013.
Según ha podido saber eldiario.es Cantabria, esos dos años de 'espera' se debieron a que los técnicos municipales desaconsejaban al Ayuntamiento recepcionar la obra, ya que presentaba deficiencias en su construcción. La versión oficial esgrimida por el alcalde es que la tramitación administrativa ha sido muy compleja.
Fue en diciembre de 2013 cuando el equipo de Gobierno aprobó la adjudicación a Yalmar Eventos. Y lo hizo después de resolver un recurso presentado por una de las empresas que aspiraba a administrar la dotación y que denunció que Yalmar no tenía experiencia. La gestión de la ludoteca del Palacio de Festivales de Santander sirvió como garantía para acreditar su solvencia.
“Mala fe”
Por su parte, los grupos municipales socialistas y regionalistas habían registrado a primera hora de la mañana una moción en la que piden al pleno que rescinda el contrato de servicio público. Esta rescisión afectaría también a la Escuela Infantil de Boo de Piélagos, ya que la gestión de ambos centros educativos fue adjudicada en el mismo concurso.
En su exposición de motivos, además de hacer constar las “irregularidades” puestas de manifiesto por las familias, la oposición acusa al gerente de la empresa de haber modificado los precios públicos establecidos “de forma unilateral y sin haber cumplido el trámite de elevar al pleno municipal cualquier modificación de la ordenanza que regula el servicio, único órgano autorizado para llevar a cabo dicha modificación”, destacan. Socialistas y regionalistas creen que el gerente ha actuado a “mala fe”.
También recriminan al equipo de Gobierno haber permitido que esta situación llegue a tales extremos al no haber detectado las deficiencias “mediante un seguimiento y una supervisión periódica de la concesión”, como era su obligación.
A juicio de ambos grupos, todos esos hechos constituyen motivo de rescisión “inmediata” del contrato, según se recoge en el pliego de condiciones técnicas y administrativas, y proponen que el Ayuntamiento, de manera temporal y hasta que se resuelva definitivamente la situación de las Escuelas Infantiles, ofrezca una solución a las familias, tal y como finalmente parece que será.