La vicepresidenta de Cantabria, Eva Díaz Tezanos, ha criticado la actuación del Ejecutivo de Mariano Rajoy de quitar a la comunidad el “derecho” que tenía desde el 2008 a abastecerse durante el verano del agua proporcionado por el embalse del Ebro. “Estamos ante un nuevo atropello del Gobierno central”, ha denunciado en rueda de prensa. Además, ha añadido que la solución planteada desde Madrid genera “dificultades técnicas, jurídicas y económicas”.
Con esta decisión, Cantabria tendrá que conseguir el agua a partir del embalse de Alsa, algo que la vicepresidenta considera que “no tiene ni pies ni cabeza” ya que esa reserva hídrica se suministra del agua proveniente del Ebro y cuenta con menos capacidad. Por ello, pide al Gobierno central que “recapacite” y que se dejen las cosas como están.
Según ha explicado, el Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente achaca su negativa a la captación por parte de Cantabria de estos 7 hm3 del pantano del Ebro en “la situación de los indicadores del plan de sequía de la cuenca del Ebro”.
El Gobierno autonómico asegura que esta justificación es “rotundamente falsa” pues esa cantidad que Cantabria ha solicitado captar este verano del pantano del Ebro no son “ni la solución ni el problema de la sequía” y es una cantidad “mínima” de la capacidad actual de este embalse.
Por ello, la vicepresidenta ha considerado que la decisión del Gobierno de España de no permitir a Cantabria tomar ese agua solicitado del pantano del Ebro -los cinco que se solicitan “cada verano” para abastecer a Santander más otros dos pedidos este año como “reserva” para la Autovía del Agua- es “muy grave”, ya que, según ha dicho, supone “eliminar” el derecho de suministro que la comunidad tiene desde 2008.
Pese a la decisión del Gobierno de España, la vicepresidenta ha explicado que en estos momentos, y desde la semana pasada, se está recibiendo agua del pantano del Ebro a través del bitrasvase del Ebro-Besaya, puesto que existe una autorización provisional para hacerlo.
Sin embargo, Díaz Tezanos y el director general de Medio Ambiente, Miguel Ángel Palacio, han asegurado desconocer si esta autorización seguirá vigente todo el verano o no, aunque entienden que no se suspenderá hasta que se encuentre una “solución definitiva”.
La decisión del Ejecutivo central fue comunicada por la secretaria de Estado de Medio Ambiente, María García, a la Consejería de Medio Ambiente en dos escritos, el último de 19 de junio, según han recalcado durante su intervención.
Como respuesta, el director general de Medio Ambiente ha enviado este lunes, 26 de junio, una carta al Gobierno central para pedirle una reunión con el objetivo de llegar a una solución “más económica, más sencilla y más viable”.
Consecuencias económicas
En cuanto al dinero que debe pagar de más el Gobierno de Cantabria por el desvío del suministro de agua al embalse de Alsa, Eva Díaz Tezanos ha explicado que estaría la indemnización, sin cuantificar, a la Electra de Viesgo por “bajar agua para consumo y no para producir electricidad”; los costes de las obras así como las instalaciones y el mantenimiento, que ascienden alrededor de los 300.000 euros; un canon, de 150.000 euros, correspondiente por captar agua del Alsa; y una amortización por las obras del bitrasvase del Ebro, en este caso, según ha informado Díaz Tezanos, que sería de un millón de euros.
La infraestructura del bitrasvase del Ebro, Besaya y Pas, que funciona desde el 2007, costó 75 millones de euros financiados parcialmente con fondos europeos y afecta a Santander, Torrelavega y a la parte oriental de Cantabria. La comunidad, como usuaria del embalse, debe pagar cada año una cuota anual fija y otra variable, en función del uso que haga.