La presentación de los presupuestos generales del Estado para el año 2017 han puesto al descubierto el compromiso incumplido por el Gobierno de Mariano Rajoy en 2016. No es solo que este año no se haya incluido ninguna partida para pagar las obras de Valdecilla, sino que los 22 millones de euros consignados el año pasado todavía no han llegado a las arcas autonómicas.
La recién elegida presidenta del PP, María José Sáenz de Buruaga, ha achacado el impago a que la Consejería de Sanidad -gestionada por el PSOE- “no ha sabido o no ha podido justificar” el gasto de las obras ejecutadas por esa cuantía. Según su versión, el Gobierno de España “ha querido pagar” pero el Ejecutivo regional ha sido “incapaz” de justificar que ese importe iba a ir dirigido efectivamente a pagar las obras ya ejecutadas, un extremo que los socialistas han negado en rotundo.
A este hecho también ha achacado la dirigente popular que en el nuevo proyecto de presupuestos se haya eliminado la partida para Valdecilla de 22 millones porque, según Sáenz de Buruaga, el Ejecutivo que preside Mariano Rajoy “no confía” en que este año el Gobierno de Cantabria pueda justificarlo, una postura, en su opinión, “muy entendible” tras lo ocurrido en 2016.
A pesar de ello, ha recordado que la partida para Valdecilla se pueda incorporar en los PGE de 2017 vía enmienda y, por ello, ha emplazado al PSOE -partido que integra junto al PRC el Ejecutivo regional y que tiene representación en el Congreso de los Diputados donde se debatirá el proyecto de Presupuestos -a que “corrija esta chapuza” votando a favor de dicha enmienda.
Cronología de los hechos
Según la versión ofrecida este viernes en rueda de prensa por la exconsejera de Sanidad y desde hace 15 días nueva presidenta del PP cántabro, el 16 de febrero de 2016 el Gobierno de España solicitó al Ejecutivo cántabro que remitiera el certificado de las obras ejecutadas que debía adjuntarse al convenio de financiación de Valdecilla para iniciar la tramitación del expediente para el pago a la comunidad de los 22 millones consignados en los PGE de 2016.
Al parecer, y según lo apuntado por Sáenz de Buruaga, el Gobierno de Cantabria respondió a esta solicitud cinco meses después, el 13 de julio de 2016, remitienndo al Ejecutivo central el certificado requerido que, según la popular, resultó “incorrecto” y debía ser “corregido”.
El 21 de septiembre el Gobierno de Cantabria mandó de nuevo la certificación, que también resultó errónea y un mes después, el día 22 de octubre, y después de varias correcciones, el bipartito regional certificó gastos de inversiones por valor de 22.111.518 euros.
Sin embargo, Sáenz de Buruaga ha explicado que, de este importe certificado, se consideró que únicamente se debía aceptar como obra debidamente justificada 13,5 millones, con lo que los otros 8,5 millones que se habían acreditado “no se admiten” como “inversión financiable” porque con la información aportada pro el Gobierno regional no podía acreditarse que esa cantidad se hubiera invertido en las obras de Valdecilla.
“El Servicio Cántabro de Salud no ha sabido, no ha podido justificar ante el Ministerio el importe de las obras realmente ejecutadas, unas obras que están a la vista de todos y que están perfectamente documentadas en la oferta presentada por la empresa adjudicataria del contrato de colaboración público privada”, ha censurado Sáenz de Buruaga.
Sin embargo, la dirigente popular ha explicado que, pese a ello, el Gobierno central siguió tramitando, tras la certificación de octubre, el expediente por importe de esos 22 millones para Cantabria, aunque reservándose la posibilidad de reintegro si el Gobierno autonómico “no era capaz de justificar todo adecuadamente”, hasta que el día 7 de diciembre, como consecuencia de “no disponer de tiempo suficiente para concluir su tramitación, no resultó posible conceder la subvención al haberse dictado ya el acuerdo de no disponibilidad y haberse cerrado el ejercicio presupuestario.
A la vista de lo relatado, Sáenz de Buruaga ha culpado de que Cantabria haya perdido esos 22 millones de 2016 para Valdecilla tanto a la “parte socialista” del Ejecutivo, por la “negligencia grave” de la consejera del PSOE María Luisa Real y su equipo al no haber podido justificar las obras, como a la “deficiente supervisión” del presidente de Cantabria, el regionalista, Miguel Ángel Revilla.
Mayor “implicación” de Revilla
Por ello, ha adelantado que el PP va a interpelar en el Parlamento al Gobierno regional para “exigirle” información sobre lo ocurrido y que explique “con todo lujo de detalles” lo que tacha de “despropósito” y que, en su opinión merece, asunción de “responsabilidades políticas”.
También la popular cree que Revilla debe hacer “autocrítica” y pensar en cuántas veces, a lo largo del 2016, ha preguntado a la consejera de Sanidad por la financiación de Valdecilla y la partida de 2016.
Para Sáenz de Buruaga Revilla tiene que “implicarse mucho más” en la gestión del Gobierno y “corregir el rumbo” de ésta porque, a juicio de la presidenta del PP, “no está siendo buena” y está teniendo “consecuencias dramáticas” para la comunidad, como la pérdida de esos 22 millones para Valdecilla.
Respuesta del PSOE
La respuesta del PSOE no se ha hecho esperar. La portavoz del grupo parlamentario, Silvia Abascal, ha acusado a Buruaga de “mentir” para “intentar justificar lo evidente”, que es que “Mariano Rajoy y el PP de Cantabria han incumplido sus compromisos de financiación” con el hospital de Valdecilla en 2016 y 2017.
“Miente Buruaga, miente Rajoy y miente el PP”, ha afirmado Abascal en un comunicado. La diputada del PSOE ha considerado las palabras de Sáenz de Buruaga como un intento “desesperado” de la dirigente popular para “buscar una justificación a las mentiras de su partido” y ha considerado “absolutamente inaceptable” que para ello “utilice la mentira”.
A juicio de la socialista, los Presupuestos Generales del Estado “demuestran” que lo sucedido con Valdecilla es una prueba del “ataque frontal” del PP a la sanidad pública y de que su modelo es la “privatización” y ha opinado que ya el hecho de que la financiación de Valdecilla no aparezca en ellos “es un motivo más que suficiente” para una enmienda a la totalidad.
Además, Abascal ha considerado que la “falta de la financiación” comprometida por Rajoy es “la prueba de que la palabra del PP no vale nada porque ha hecho de la mentira su forma de gobernar”.
La socialista ha asegurado que los datos de la Intervención General del Gobierno de Cantabria “desmienten los aportados” por Sáenz de Buruaga ya que demuestra que el 1 de diciembre de 2016 se remitió el correspondiente certificado de gastos de inversión por un importe de 22.111.508,60 euros al servicio Cántabro de Salud y éste lo remitió el mismo día a la Administración Central.
“Es mentira que no se emitiera el certificado y, por tanto, las excusas que da el PP son también falsas”, ha afirmado la portavoz socialista en el Parlamento de Cantabria.