Cantabria reducirá a final de año su plantilla de rastreadores COVID a la mitad. En concreto, medio centenar de profesionales del control y seguimiento de los brotes de coronavirus que se producen en la comunidad autónoma serán cesados en plena ola de contagios, que está incrementando la incidencia y el número de hospitalizados, y que ha llevado este mismo lunes a la Consejería de Sanidad a reimplantar el Semáforo COVID.
Así lo han dado a conocer los propios rastreadores de la Dirección General de Salud Pública afectados por esta decisión, en una nota de prensa en la que han detallado que la justificación que ha dado el Gobierno de Cantabria para ello atiende a “razones presupuestarias”, cuando las cuentas recién aprobadas por el Ejecutivo autonómico para el próximo año recogen una partida récord para Sanidad que supera los 1.000 millones por primera vez.
“El mes pasado, el Gobierno presentó unos presupuestos de los que presumía que eran los más altos en Sanidad de la historia de la Comunidad. Si la principal herramienta de lucha contra el COVID es el rastreo y este se reduce, ¿dónde se están invirtiendo estos fantásticos presupuestos?”, se cuestionan los rastreadores que van a ser despedidos a las puertas de un puente y en un contexto de festividades navideñas donde aumentan las reuniones familiares y el contacto social.
En este sentido, estos profesionales han hecho “un llamamiento al Gobierno de Cantabria a mantener la unidad de rastreo con los mismos integrantes hasta el control de la crisis sanitaria”.
“No se entiende esta decisión de reducción de la plantilla al 50% por razones presupuestarias cuando se está invirtiendo en otros aspectos que no son prioritarios, es cuando menos una decisión precipitada, única y exclusivamente de carácter económico, y que priva a la ciudadanía de Cantabria de un servicio público de orden prioritario, necesario y de calidad en un momento crítico”, sentencian.
Cuestionados por este asunto, el departamento que dirige el consejero, Miguel Rodríguez, asegura a este medio que “en todo momento se ha dicho que se van a adaptar las contrataciones a la evolución de la pandemia”.
En las últimas horas, la incidencia de casos de COVID por 100.000 habitantes en Cantabria ha alcanzado los 153, aunque se mantiene en riesgo medio, si bien para los mayores de 65 años ha entrado en riesgo alto tanto a 14 como a 7 días, según los últimos datos de la Consejería de Sanidad.
Así, este 28 de noviembre se han registrado en Cantabria 93 nuevos casos de coronavirus -seis más que la víspera- y ha crecido el número de hospitalizados, que ya son 33, y en las Unidades de Cuidados Intensivos, que ascienden a siete pacientes.
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