El consejero de Obras Públicas de Cantabria, José Luis Gochicoa (PRC), considera “normales” y “lógicas” cuestiones como la autorización a los ganaderos de la región para que puedan coger agua de los ríos y cubrir así sus necesidades en caso de sequía.
Cree que la medida, solicitada por el departamento de Desarrollo Rural a las confederaciones hidrográficas, es “una buena alternativa” al sector y, además, no va a afectar “en nada” al abastecimiento de agua en la comunidad autónoma, que “siempre” es prioritario y está “funcionando correctamente”.
Así lo ha manifestado Gochicoa este miércoles a preguntas de los periodistas tras la solicitud del también titular de Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, el regionalista Guillermo Blanco, a los organismos de las cuencas del Cantábrico y del Ebro.
La petición ha sido concedida y el Gobierno ha enviado a los 102 ayuntamientos cántabros las instrucciones a seguir para que ganaderos -y servicios de extinción de incendios también- puedan captar agua de los cursos fluviales y pantanos.
En este sentido, el responsable de Obras Públicas, Ordenación del Territorio y Urbanismo ha apuntado que ese permiso va condicionado a que se pida la captación y a que donde se realice no suponga “ningún menoscabo” hacia las tomas que existan de aprovechamiento de agua.
Considera que es “una buena alternativa”, sobre todo para los ganaderos y sus animales, ya que así no tienen que desplazarse a una estación de tratamiento de aguas o a un depósito de la red de abastecimiento “si tienen un río más cercano” del que poder suministrar directamente.
Al hilo, Gochicoa ha puesto el ejemplo de una explotación en la zona del embalse del Ebro, que tiene una capacidad “tremenda”, y ha opinado que no tendría “mucho sentido” que no pueda usar ese agua que “al fin y al cabo va a volver otra vez al sistema y al pantano, de una forma u otra”.
El consejero ha indicado que aunque este embalse esté a la mitad de su capacidad (al 51,2 por ciento la última semana), alberga más de 250 hectómetros cúbicos (276,4 hm3, según el último parte de la Confederación, de los 540,6 que puede llegar a almacenar), y ha contrastado el volumen actual con las “necesidades puntuales” que se alcanzan “normalmente” en Santander y el entorno de la Bahía en verano, que pueden ser de 5 hm3.
“Ni en cuarenta años seríamos capaces de agotar las capacidades que tiene el pantano del Ebro aun suponiendo que no lloviera nunca, lo cual evidentemente no va a suceder”, ha manifestado Gochicoa.
Para finalizar, ha recordado que es un embalse plurianual, es decir, que es “capaz de aguantar” dos años de sequía o incluso tres “sin ningún tipo de precipitaciones”, y ha incidido en que se trata de “volúmenes muy importantes de agua” almacenada que “nada tiene que ver” con lo que capta Cantabria para poder abastecerse y que, en todo caso, se recuperará en invierno gracias al trasvase del Ebro y las cuencas del Besaya y el Pas.