Santander ha acogido este jueves un pleno que ha estado marcado por varios asuntos que han generado especial controversia entre los diferentes grupos municipales. Entre ellos, destacan las peticiones de reprobación del jefe de Cultura del Ayuntamiento de Santander tras sus opiniones islamófobas vertidas en un artículo de opinión la pasada semana.
Sobre este asunto, se han debatido dos mociones, una del concejal no adscrito Antonio Mantecón en la que se pedía la reprobación de Enrique Álvarez y otra de la concejala de Ganemos, Tatiana Yáñez, en la que se solicitaba su cese del cargo que ocupa desde hace 30 años.
Ambas iniciativas han sido rechazadas con los votos en contra de PP y el edil no adscrito David González, exconcejal de Ciudadanos, y las abstenciones de PSOE, PRC, IU y la exedil de la formación naranja y ahora no adscrita Cora Vielva. Por su parte, Antonio Mantecón y la portavoz de Ganemos han votado a favor de sus iniciativas y se han abstenido en la que no presentaba cada uno.
El debate conjunto ha comenzado con la exposición de los motivos de la moción de Mantecón, que ha desembocado en una retahíla de aplausos entre el público asistente, lo que ha obligado a la alcaldesa, Gema Igual, a dar un toque de atención advirtiendo de que están prohibidas las manifestaciones de los presentes.
Además de la reprobación, de la apertura de un expediente disciplinario y de su retractación, la iniciativa solicitaba “suspender en el futuro cualquier colaboración económica con cualquier medio de comunicación local que difunda contenidos de corte xenófobo, racista, homófobo o que fomenten el odio, el desprecio, la estigmatización y escarnio público contra cualquier colectivo, por cuestiones de religión, raza, condición sexual o de otras índoles”, así como “elaborar un código de buenas prácticas junto a la Asociación de Prensa de Cantabria”.
Este punto ha impedido que Vielva y Yáñez votaran a favor de la moción ya que, según han manifestado, “coincidían con el contenido” pero entendían que “censuraba la libertad de prensa”, por lo que han solicitado que se retirara, petición que Mantecón ha rechazado.
La exposición de motivos de la moción presentada por la portavoz de Ganemos, en la que ha subrayado que la “crueldad de las opiniones de Enrique Álvarez no son compatibles con su cargo”, también ha motivado aplausos y, nuevamente, la regidora ha llamado al orden al público que se encontraba presente en la sesión plenaria.
Miguel Saro (IU), por su parte, ha expuesto que las opiniones expresadas por el jefe de Cultura del Ayuntamiento de Santander son una “visión integrista y fundamentalista de la religión católica” e, igualmente ha mostrado su desaprobación.
Sin embargo, ha hecho hincapié en que se trata de opiniones a nivel personal y no como funcionario público y que lo ha hecho en el contexto de “su libertad de expresión por lo que no se le puede perseguir como empleado público por ello”. “Hay que criticar y valorar todas las creencias y religiones, y ello no engloba a una comunidad”, ha señalado.
En la misma línea se han pronunciado PSOE y PRC. El portavoz socialista, Pedro Casares, ha considerado “irresponsables” las afirmaciones de Álvarez y una “barbaridad” publicarlas días después de los atentados.
Por su parte, la edil del PRC, Amparo Coterillo, ha señalado que se enmarcan en su libertad de expresión “aunque no nos guste” y ha opinado que la polémica se ha generado por la “respuesta débil e insuficiente” de la alcaldesa ante ellas. Asimismo, David González ha considerado que la afirmaciones del jefe del Servicio de Cultura “son una opinión personal privada realizadas en un medio privado”
Desde el equipo de Gobierno (PP), la concejala de Cultura, Miriam Díaz, ha criticado que se trate de promover una “purga” pidiendo “la cabeza” de un funcionario por expresar, acogiéndose a su derecho fundamental, “su opinión sobre la religión”.
Aunque ha reconocido no compartir dicha opinión, la concejala ha enfatizado que Álvarez habla de “algo personal”, una creencia que, ha dicho, no le ha impedido ejercer su cargo de forma profesional y “sin discriminar a nadie”.
Álvarez afirmaba en su artículo de opinión, publicado tras los atentados de Barcelona y Cambrils, que el Islam es “una religión mala y perversa” y urgía a “restaurar la religión de Cristo y limitar al máximo la de Mahoma”.
Estas afirmaciones generaron la pasada semana mucha polémica entre diferentes colectivos, entre ellos algunos partidos políticos, y que incluso han celebrado este jueves una concentración para apoyar las peticiones de Mantecón y Ganemos para su destitución.
“Le están amenazando y ustedes incluso han convocado una manifestación”, ha espetado Díaz a los dos concejales que han llevado sendas iniciativas al Pleno y a quienes ha criticado que traten de limitar la libertad de expresión a “un pensamiento único: el suyo”.
Y al resto de la oposición, principalmente a PSOE y PRC, que han criticado las palabras de Álvarez a quien han tachado de “irresponsable” por publicar esa opinión días después de los atentados de Barcelona y Cambrils, Díaz les ha recriminado que opinen de este asunto en el Pleno y no le hayan dicho nada a él personalmente como sí ha hecho ella.
“Sabéis que Enrique es una buena persona, una persona de paz que no haría daño a nadie”, ha manifestado la edil, que ha insistido en que, a raíz de toda la polémica generada, este funcionario y escritor está recibiendo “amenazas”.
Y ante ello, la alcaldesa, Gema Igual, ha pedido a los grupos de la oposición que se metan con ella y el equipo de Gobierno y “no con los funcionarios del Ayuntamiento”, como Álvarez o el de otros, como es el caso de algunos de Urbanismo, a los que han “llevado al juzgado”.
“Es cobarde venir aquí y poner así a Enrique Álvarez, sin hablar con él y poniéndole en el punto de mira”, ha denunciado la regidora municipal, a quien algunos grupos también han criticado durante el debate por mostrar “su respeto” a las afirmaciones del jefe del Servicio de Cultura y no reprobarlas cuando conoció el artículo y fue preguntada sobre el mismo por los periodistas.
“Igual no tiene la misma opinión que el jefe de Cultura pero la respeta”, ha dicho, y ha insistido en que “se deje de meter en el terreno político a los funcionarios”, que no son cargos electos y que desarrollan en el Consistorio un trabajo, pero fuera de él tienen su vida, sus opiniones y creencias.
Nuevos callejero
Por otro lado, en el pleno se han aprobado nuevos nombres para dos plazas y tres calles, algunos en cumplimiento de la Ley de Memoria Histórica. No ha sido el caso de la nueva denominación como plaza Emilio Botín a la zona que rodea el centro de arte como reconocimiento al mecenazgo del banquero santanderino fallecido en 2014 y que solo ha salido adelante con los votos del PP y el edil no adscrito David González.
Y es que el resto de la oposición municipal ha criticado por tratarse de “una propuesta unilateral del PP”, que quiere seguir “patrimonializando” la ciudad y han denunciado que, con su aprobación, Santander vaya a tener dos plazas con el mismo nombre ya que el espacio junto a la Escuela de Náutica también se llama plaza Emilio Botín, aunque en honor al abuelo.
Sin embargo, se han aprobado por unanimidad los cambios propuestos para las calles Alcázar de Toledo, División Azul y Columna Sagardía por Cuesta de las Ánimas, calle de La Secada y calle de Las Rederas y, sin estar incluida en las denominaciones que hay que proceder a cambiar por ley, la plaza de Matías Montero por plaza de Puertochico.
Además de aprobarse con los votos de PP, PSOE, PRC y los ediles no adscritos Cora Vielva y David González que las fiestas locales de 2018 sean Santiago (25 de julio) y los Santos Mártires (30 de agosto), se ha rechazado una moción de Vielva instando a estudiar medidas de protección física en zonas de la ciudad para impedir ataques terroristas.
La mayor parte de los concejales han defendido que no es competencia del Ayuntamiento decidir esas medidas sino de la Policía Nacional y el Ministerio del Interior. Se ha rechazado la iniciativa con los votos de PP, PSOE y PRC y las abstenciones de IU y Mantecón, y solo han votado a favor González, Vielva y Yáñez.
También se han aprobado en la sesión plenaria las modificaciones en las ordenanzas de ayudas para la realización de obras en fachadas de edificios catalogados y para la primera instalación de ascensores en edificios residenciales preexistentes, cuyas principales novedades es el incremento de la ayudas y la simplificación de su tramitación. Estas modificaciones han salido adelante con los votos del PP y los dos exediles de Cs y las abstenciones de PSOE, PRC, IU, Ganemos y Mantecón.