A Vox cada vez le gustan menos cosas en Cantabria. La formación de extrema derecha en el Ayuntamiento de Polanco ha votado ahora en un pleno municipal en contra de la declaración de la localidad como 'Ciudad Amiga de la Infancia', un programa de Unicef que consideran que se alinea con la lucha contra el cambio climático, evidencia científica que niegan, y tachan cualquier iniciativa que vaya encaminada a la salvaguarda del planeta como este caso de “fanatismo climático”.
Así lo han reconocido los propios representantes de Vox en Polanco, que han explicado que no apoyaron la iniciativa aprobada en el último pleno del Ayuntamiento para que el municipio sea declarado 'Ciudad Amiga de la Infancia“ por Unicef por ser un programa ”alineado con los Objetivos de Desarrollo Sostenible y con la Agenda 2030“.
El Ayuntamiento de Polanco está gobernado por el PRC, que obtuvo siete concejales el pasado 28 de mayo en las elecciones municipales. La alcaldesa es la regionalista Rosa Díaz, quien gobierna con mayoría absoluta. El Partido Popular tiene tres concejales, dos el PSOE y Vox solo uno.
La concejala de Vox en el municipio, Sara de la Llama, ha argumentado que “es una vergüenza que se pretendan implantar proyectos ideológicos globalistas a nuestros niños adoctrinándoles en el fanatismo climático y en las políticas de puertas abiertas que tanto están perjudicando a todos los españoles”.
Así, el partido de extrema derecha ha denunciado “la manipulación” del equipo de gobierno del PRC por señalar a través de un comunicado que Vox no había apoyado la propuesta “pese a reconocer que estaba de acuerdo con el 98% de los puntos de la declaración”, y manifestar que había votado en contra aludiendo a “directrices políticas” de la formación.
De la Llama ha justificado su postura contraria argumentando que “no es necesario implementar medidas en apoyo a la infancia” porque “ya están recogidas en la Constitución”. Así, ha asegurado que la oposición de Vox a este reconocimiento “es total”, y sobre todo “cuando se trata de la infancia, etapa vital de especial vulnerabilidad que debemos proteger especialmente”.
Tampoco la perspectiva de género
No solo es la fobia a la lucha contra el cambio climático. El voto negativo de Vox se fundamenta, según sostienen, “en la introducción en las aulas de una educación sexual mediatizada por la perspectiva de género”. “Entre algunos de los aspectos más nocivos se encuentran incorporar una asignatura obligatoria en todas las edades sobre sexualidad con perspectiva de género, la eliminación de una masculinidad tóxica 'hegemónica' o programas que se hacen eco de las tesis del fanatismo climático”, ha apuntado la edil.
Por todo ello, De la Llama considera necesario “liberar a nuestros niños de las imposiciones ideológicas de las élites globalistas y proteger su inocencia y su infancia para asegurarles el óptimo desarrollo personal y social”. “Los hijos son de los padres y no del Estado ni de ningún organismo supranacional”, ha sentenciado.
Otros municipios
En Cantabria, Vox está también protagonizando sonoros vetos y oposiciones. En la capital, el grupo municipal propuso que en las pasadas fiestas de Santiago se censurara un festival popular y solidario en Santander por considerarlo “politizado”. Y, en Bezana, en donde gobierna junto al PP, Vox forzó la retirada de una bandera LGTBI de la fachada del Ayuntamiento y censuró la proyección dentro de sus actividades veraniegas de una película infantil de Buzz Lightyear en la que dos mujeres se besaban. La respuesta popular en este municipio fueron sendas manifestaciones, incluida una 'quedada de besos' a la puerta del Ayuntamiento.