Carta con respuesta es un blog del escritor Rafael Reig. Dejad vuestros comentarios en este blog sobre vuestras preocupaciones políticas, sociales, económicas, teológicas o de cualquier índole, y él os responderá cada martes.
La tenaza
Le doy toda la razón, también pienso que esa Ley de Racionalización y Sostenibilidad de la Administración Local es un recorte, no de gasto (como pretenden), sino un enorme recorte de democracia.
El cimiento de un sistema democrático lo constituye el autogobierno local y alejar de los ayuntamientos las decisiones sobre prestación de servicios, para concentrarlas en las diputaciones, es quebrantar la democracia y poner proa hacia un régimen autoritario.
Mientras que los ayuntamientos se eligen directamente por los vecinos, el pleno de la diputación es una elección indirecta y por lo tanto el modo más sencillo de que el partido más votado acumule todo el poder, impidiendo que en muchos ayuntamientos gobiernen los votados por los vecinos. Así se cercena la autonomía local y disminuye gravemente la representación democrática.
Lo más alarmante es la tenaza en la que nos están atrapando. Por arriba, en la Unión Europea, nos someten a un grave déficit democrático, gobernados por una Comisión a la que los ciudadanos no hemos elegido. Por abajo, ahora también pretenden que las diputaciones, que no han sido elegidas por los ciudadanos, gobiernen de hecho nada menos que el 72% de los ayuntamientos españoles.
Así estamos, atenazados; con una democracia que se deshace como un jersey de lana con puntos sueltos en las dos mangas, y de cuyo hilo van tirando a la vez Rajoy y Merkel.
Se trata, por tanto, de un paso decisivo para hacer posible que una oligarquía pueda campar a sus anchas sin el más mínimo control democrático.
¿Vamos a sentarnos a esperar que deshilvanen la democracia por completo y nos conviertan en siervos? También yo me hago la misma pregunta que usted. Pero confío en que la respuesta nos la demos pronto nosotros mismos, organizando nuestra rabia en una insurrección colectiva.
Le doy toda la razón, también pienso que esa Ley de Racionalización y Sostenibilidad de la Administración Local es un recorte, no de gasto (como pretenden), sino un enorme recorte de democracia.
El cimiento de un sistema democrático lo constituye el autogobierno local y alejar de los ayuntamientos las decisiones sobre prestación de servicios, para concentrarlas en las diputaciones, es quebrantar la democracia y poner proa hacia un régimen autoritario.