La lluvia que ha caído a lo largo de los últimos días en Castilla-La Mancha “va a ayudar a consolidar la futura cosecha de cereales, de leguminosas, como probablemente la próxima vendimia”, ha asegurado el consejero de Agricultura, Francisco Martínez Arroyo, en un rueda de prensa en Toledo.
El consejero, que ayer mismo había podido recabar la satisfacción de los agricultores de la región por el agua caída, ha señalado que ha sido “muy positiva, porque ha sido una lluvia de la que agradecen los agricultores, de la que empapa el suelo y permite garantizar cosechas”.
En cifras, ha señalado que han caído en torno a “100 litros por metro cuadrado en la comarca de La Mancha, pero la verdad es que ha llovido en todos sitios y tenemos unas muy buenas perspectivas para los próximos días”, y ha recalcado que la lluvia ha llegado en muy buen momento para el campo.
Este contexto ha manifestado que los agricultores están muy satisfechos por estas lluvias pero también por “la evolución del sector que ha pasado en dos años de un 13% de aportación al Producto Interior Bruto de la región a un 15%. Desde luego, estamos en un momento muy dulce”.
En el mismo sentido se ha manifestado Pedro González, responsable de seguros de UPA en Castilla-La Mancha, que ha destacado como el agua caída a lo largo de esta Semana Santa ha sacado de una situación “crítica” a los cultivos herbáceos y leñosos. “Tanto al olivar, almendro y viñedo de secano les ha venido muy bien porque no estaban acumulando ningún tipo de reservas este invierno”.
Las precipitaciones de estos días han dejado en la provincia de Albacete, una media de 100 litros por metro cuadrado-- 160 en algunas zonas – lo que ha supuesto un alivio para los agricultores tras casi cuatro meses sin precipitaciones. “Venimos de un invierno atípico, muy suave, donde la temperatura ha sido más alta de lo normal especialmente en los meses de feberero y marzo”, ha manifestaco González.
Por lo tanto, “es una agua que viene bien”, también para el regadío pero, tal y como asegura el responsible de seguros de UPA en la región, “ahora necesitamos sol y aumento de temperaturas para que los cultivos terminen de arrancar”.
La cabecera del Tajo
Respecto a la posibilidad de que estas lluvias influyan en los trasvases, el consejero ha señalado que “a pesar de las lluvias tenemos menos agua en los embalses de la cabecera del Tajo y las decisiones a partir de ahora se tengan que tomar desde otra perspectiva en el marco de la Confederación Hidrográfica del Tajo”.
Ha reiterado que “el agua para los regadíos del Levante tiene que venir de las desaladoras”, y en este sentido ha recordado que recientemente “hemos tenido noticias de la desaladora de Torrevieja., que está suponiendo más volumen de agua que el propio trasvase, es decir que estamos en condiciones de que el agua para el riego en el Levante venga ya de las desaladoras”.
A su juicio, “es una estupenda noticia para los agricultores del levante porque a partir de ahora van a tener ese agua más garantizad de lo que lo tenemos ahora con el trasvase y es una buena noticia para la región, porque el agua que está aquí nos tiene que ayudar a generar desarrollo aquí”, ha concluido.