El sector del vino pide medidas para las nuevas amenazas tras la pandemia y una defensa explícita del consumo moderado

Las nuevas situaciones que amenazan la recuperación del sector del vino tras la pandemia, entre ellas la guerra en Ucrania y la necesidad de una defensa explicita del consumo moderado de vino son los principales mensajes que el presidente de la Federación Española del Vino (FEV), Emilio Restoy, ha transmitido en la apertura de la jornada 'El vino español en el escenario post-COVID: la internacionalización como motor de la recuperación', organizada por la entidad con motivo de la celebración de su Asamblea General de socios que se ha celebrado en Toledo.

Restoy ha pedido a las Administraciones que trabajen junto al sector para ofrecer medidas ante las amenazas que ponen en riesgo la recuperación tras la pandemia, en un momento marcado por la escalada en los precios de la energía, los problemas con el transporte, el aumento de costes generalizado y la falta de suministros, que se agravan ante el periodo de gran incertidumbre política y económica que atravesamos a nivel global tras la invasión de Rusia a Ucrania.

Respecto a esta última, Restoy ha señalado que el drama humano que supone la guerra “está teniendo un impacto a corto y medio plazo” en las industrias, con falta de suministros y de precios.

Así, ha recordado que el sector, tras un año de pandemia para “olvidar” por muchos motivos, ya se estaba recuperando en 2021, en gran parte por los resultados de la exportación y el récord de la comercialización de vinos envasados, consciente de que los mercados exteriores han demostrado una “importante resiliencia y crecimiento”.

“Lo estamos haciendo bien”, ha destacado, aunque ha abundado en que no hay que caer en la autocomplacencia porque el crecimiento del sector no sucede “al ritmo que deberíamos” debido a la “mayor disparidad de comportamiento entres el vino a granel y el envasado”, pues este último crece y el primero no, un hecho que supone “un lastre para el mundo del vino español en general y para la construcción de la marca España”.

Frente a ello, ha citado las “palancas” que a su juicio existen para mejorar, como la de aprovechar la “excelente” imagen que tiene la gastronomía española y cómo utilizarla para vender el consumo de vino español y la marca España. En este sentido, ha avanzado que la FEV está trabajando con el Ministerio y el IPEX en distintos proyectos que unirán la gastronomía a nivel internacional y el consumo de vino.

Consumo moderado

Al margen de la coyuntura actual, Restoy ha pedido a los representantes del Gobierno de España y de Castilla La Mancha en la Asamblea su apoyo explícito y rotundo en una cuestión fundamental: garantizar para las generaciones futuras la legitimidad del consumo moderado de vino como “parte intrínseca de nuestro estilo de vida”.

“En los últimos meses hemos asistido con gran preocupación a un debate público, político y mediático promovido desde Europa en el que se ha llegado a asegurar, de forma maximalista y sin una base científica suficiente, que una sola copa de vino es perjudicial para la salud, proponiendo que podrían afectar gravemente a la imagen y al futuro del vino”, ha destacado el presidente de la patronal bodeguera.

En este sentido, ha puesto en valor la reacción de la FEV y del resto de asociaciones europeas para hacer ver en Bruselas que no se puede simplificar algo tan serio ni meter a todos en el mismo saco.

“Nosotros vamos a seguir promoviendo en la sociedad que la moderación es el único patrón de consumo posible cuando hablamos de vino y que, asociado a una dieta saludable como la Dieta Mediterránea y a la gastronomía puede ser parte de la solución al problema del consumo abusivo de alcohol, pero necesitamos que también nos ayudéis a transmitir estos mensajes tanto aquí como en Bruselas, para llevar a Europa una voz única que defienda nuestros productos y sectores más emblemáticos desde la serenidad y la evidencia científica”, ha concluido el presidente de la FEV.

PERTE Agroalimentario

Por último, el presidente de la FEV, en presencia del secretario general de Agricultura y Alimentación, Fernando Miranda, ha reconocido que, a pesar del entusiasmo y del trabajo de la FEV para presentar plan sectorial que recogiese de forma exhaustiva y detallada las necesidades para una transformación real del sector vitivinícola de cara a los fondos Next Generation, la realidad es que el PERTE Agroalimentario recientemente aprobado “carece de la ambición necesaria para ser verdaderamente transformador”, tanto en su dotación presupuestaria como en los problemas derivados de la ejecución práctica.

“Nos preocupa mucho perder esta oportunidad y esperamos al menos que las órdenes para la aplicación de estas ayudas faciliten su ejecución al tejido de pequeñas y medianas bodegas que componen nuestro sector y se doten con más fondos otras líneas de ayudas ya existentes para compensar en parte la falta de recursos asignados”, ha señalado al respecto.

Jornada

La jornada ha continuado con varias ponencias sobre ‘El vino y sus competidores en el panorama mundial tras la pandemia’, ‘El mercado del vino en el Reino Unido post-brexit’ y una mesa redonda sobre ‘Cómo aumentar el valor del vino español en los mercados exteriores. Claves y retos’, con las que se ha dado un panorama general del momento que atraviesa el sector y de los retos del futuro.

Los encargados de cerrar la sesión que se ha desarrollado a lo largo de toda la mañana han sido el consejero de Agricultura de Castilla-La Mancha, Francisco Martínez Arroyo, que ha recordado la importancia económica que tiene el sector del vino en Castilla-La Mancha, el presidente de la región Emiliano García Page, que actualmente también preside la Asamblea de Regiones Vitivinícolas Europeas.  

García Page ha valorado el sector agroalimentario como “la principal industria” de Castilla-La Mancha, al tiempo que ha incidido en que “asienta el territorio, conserva el empleo en amplias zonas del territorio y democratiza el esfuerzo y al mismo tiempo el resultado”, algo que “es clave para un país”, ha razonado.

En el ámbito europeo, Emiliano García-Page ha celebrado la negociación de la Política Agraria Común de la que “estamos orgullosos, porque esta región va a salir muy bien” y ha anunciado que su intención de acudir “en mayo a Bruselas acompañado de los sindicatos agrarios” para seguir trabajando en la defensa de la PAC.