Un total de 28 investigadores de 16 instituciones españolas e internacionales, entre las que se encuentra la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) están trabajando en el proyecto ECOSPAS, cuyo objetivo radica en estudiar los efectos del pastoreo tradicional sobre la biodiversidad, la huella de carbono y el desarrollo socioeconómico del territorio.
La participación de la UCLM en este proyecto, que lidera Javier Pérez-Barbería, investigador del Instituto Mixto de Investigación en Biodiversidad (IMIB), adscrito al Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), se materializa en la experiencia de Isabel Berruga, Ana Molina, Miguel Ángel Gómez Borja, Inmaculada Carrasco Monteagudo y Carlota Lorenzo, quienes se integran en un amplio equipo de colegas de España, Portugal, Australia o Escocia, ha informado la UCLM en nota de prensa.
El proyecto, que se desarrollará sobre el terreno en Castilla-León y un área de Castilla-La Mancha, se estructura en tres áreas de trabajo que se ocupan, respectivamente, de los efectos de los niveles reales de pastoreo y ramoneo del pastoreo tradicional en la biodiversidad de la comunidad y el paisaje; de estimar la huella de carbono del pastoreo tradicional, y, por último, de buscar modelos de negocio basados en la economía social, recursos turísticos, digitalización y mecanismos para mejorar la integración social de las familias de pastores y concienciar a la sociedad de los valores del pastoreo tradicional.
“El proyecto contribuirá a hacer del pastoreo tradicional una herramienta útil para la restauración de ecosistemas y ayudar a mitigar el abandono rural”, subrayan sus responsables.
El proyecto ECOSPAS cuenta con una financiación de 254 000 euros del Ministerio de Ciencia e Innovación a través de los fondos para Proyectos Estratégicos Orientados a la Transición Ecológica y a la Transición.