“Quiero una explicación. ¿Por qué no se ha puesto la primera dosis de la vacuna en la vivienda tutelada?”.
Así de rotundo se muestra Javier Cantero, alcalde de La Toba, un pequeño municipio de la Sierra Norte de Guadalajara que no llega a los 100 habitantes.
“Estoy que me subo por las paredes. Se está diciendo a los medios de comunicación que ya se ha terminado con la primera dosis en los centros socio-sanitarios y que se ha comenzado con la segunda dosis pero…¡Es que las viviendas tuteladas también lo son!”, exclama indignado en conversación telefónica con elDiarioclm.es
Javier Cantero apunta que las viviendas tuteladas “tienen las mismas obligaciones que cualquier centro socio-sanitario, así que también debemos tener los mismos derechos” y critica la actitud del Gobierno regional.
Se está diciendo a los medios de comunicación que ya se ha terminado con la primera dosis en los centros socio-sanitarios y que se ha comenzado con la segunda dosis pero…¡Es que las viviendas tuteladas también lo son!
“Nos mandaron un correo electrónico en plena descarga de la borrasca ‘Filomena’, creo que el viernes 8”. En el requerimiento, explica, “pedían saber urgentemente, para ese mismo día, cuántas personas forman parte de la vivienda tutelada entre mayores y trabajadores”.
El alcalde envió los datos ese mismo día: los nombres, apellidos y DNI de los 13 residentes y trabajadores. Ya el lunes, el alcalde relata que recibió un segundo correo de la Junta castellanomanchega. “De nuevo, urgentemente, querían sin falta el documento de autorización o negativa, incluida la firma de los residentes y trabajadores”.
“Tuvimos que hacerlo deprisa y corriendo, con la nevada, de un pueblo a otro recogiendo las firmas de los trabajadores, las de los residentes…”.
Pese a todo, dice, lo importante era la vacuna y no el medio metro de nieve acumulada en la zona. “Hubiera ido en trineo a buscar las firmas de consentimiento. Nueve meses esperando y no voy a decir que es que ha nevado. Eso es una anécdota”.
Después, dice, “ha pasado una semana, ha pasado otra y cuando llamo al centro de salud de referencia, que es el de Jadraque, me dicen que están con la residencia de ancianos y que a la vivienda tutelada se llegará a mediados o finales de febrero”.
La indignación y la preocupación, relata este edil, va a la par a lo largo de la conversación. “Yo también tengo personas de 90 años que necesitan oxígeno. Joder, que hemos pasado nueve meses peleando para que no entre la COVID. Y ahora que hay vacuna nos dejan para un segundo o tercer turno”.
“Los pueblos pequeños tenemos los mismos derechos que los grandes”
Recuerda que “los pueblos pequeños tenemos los mismos derechos que los grandes. Los residentes y trabajadores de las viviendas tuteladas también. ¿O es que los hay de primera y segunda?”, pregunta a los responsables sanitarios de Castilla-La Mancha.
El edil dice no entender lo que ha pasado. En la vivienda tutelada de su pueblo no hay contagios. Ese es el argumento que ha ofrecido el Gobierno regional para ‘saltarse’ el turno de vacunación en aquellos centros que no estén libres de coronavirus. Lo explicaba la consejera portavoz, Blanca Fernández esta misma semana.
“Es incierto”, asegura Cantero, quien cree además que esta situación se está repitiendo en el conjunto de viviendas tuteladas de la provincia de Guadalajara. “En las de los pueblos de nuestro entorno como Arbancón, Espinosa de Henares, Membrillera…Que yo sepa no están vacunando y tampoco ha habido casos”.
“Hemos pasado de cero a 14 contagios. Estoy oyendo las balas”
La preocupación en este pequeño pueblo serrano ha crecido después de las Navidades. El alcalde asegura que el pueblo se ha mantenido limpio de contagios hasta ahora y, con él, la vivienda tutelada. Teme que eso cambie si no llega pronto la vacuna.
“Hemos pasado de cero a 14 contagios. Estoy oyendo el ruido de las balas por todos lados y no sé por dónde me disparan”, lamenta. Eso pese a que “los casos están controlados porque están en las mismas familias, en cuarentena y no hay hospitalizados. Les llevamos la comida y hasta el gasoil”, dice este alcalde que, como otros muchos en la región, ha publicado un bando pidiendo a la población el autoconfinamiento.
“Estamos todos los pequeños pueblos en el mismo barco. Y pasan de nosotros. Luego hablan de despoblamiento”.