El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha anunciado este viernes en Cuenca que su gobierno derogará, a partir del lunes, “toda la normativa que hemos ido implementando con motivo del COVID” en la Comunidad Autónoma. La decisión se adoptará en la reunión del Consejo de Gobierno que se celebrará el lunes, 9 de mayo. “Tenemos cosas prohibidas que se están haciendo y no queremos entrar en contradicciones. Vamos a peinar la legislación”, sin dar más detalles.
García-Page hacía estas declaraciones durante la entrega de los ´Premios de Investigación e Innovación de Castilla-La Mancha 2021´ en la que se ha reconocido el trabajo de los profesionales de este ámbito que, “en la discreción más absoluta”, contribuyen a “garantizar que una sociedad no pierda la inquietud”, ha enfatizado.
“Estamos viviendo un momento enormemente trascendente para la investigación mundial”, ha proseguido el presidente autonómico, que se ha mostrado favorable a “actualizar” y “depurar” la legislación puesta en marcha a raíz de la pandemia, dado que “la parte de emergencia está controlada”, ha asegurado, en contraposición al “tsunami” provocado por la primera ola.
“Hemos llegado a una conclusión social, económica, cultural y científica de que la situación la podemos abordar de otra forma”, ha señalado el presidente García-Page, al tiempo que ha considerado que la superación de la pandemia constituye “uno de los grandes avances científicos de la humanidad”, en el marco de una “respuesta verdaderamente extraordinaria” en referencia a la creación y aplicación de las diferentes vacunas contra el coronavirus.
En el contexto de la pandemia, hay que recordar que seis comunidades tendrán que devolver 809 millones de euros, más de la mitad de las ayudas a pymes por la pandemia y entre ellas Castilla-La Mancha, que solo ha ejecutado el 39,58% de los fondos estatales que recibió para este fin. Desde el Ejecutivo regional alegan que se debe “a las ayudas propias” que concedió la comunidad autónoma antes de que llegasen los fondos desde el Estado.
Hoy el presidente del Partido Popular de Castilla-La Mancha, Paco Núñez, lo calificaba de “jarro de agua fría”. Ha recalcado que “frente al modelo socialista, obligado a devolver los fondos destinados a autónomos y pymes, porque el Gobierno de Page no los sabe gestionar, y, frente al modelo socialista de más impuestos y menos gestión, el modelo del PP Castilla-La Mancha, el que funciona en Andalucía y Madrid, que es el modelo de bajos impuestos y el de que participen en los planes de empleo”.