En la vendimia de Castilla-La Mancha, se acabó la etapa “de los contingentes de inmigrantes, de la explotación, los fraudes masivos en la contratación y en las cotizaciones a la Seguridad Social, de la falta de alojamientos o de alojamientos infrahumanos…”.
La campaña se ha “normalizado”. Así lo cree el sindicato CCOO que asegura que frente a la masiva presencia de inmigrantes en la vendimia durante los años previos a la crisis, “en las últimas campañas se aprecia una mayor incorporación de trabajadores locales, empujados por el desempleo”.
El fenómeno se ha generalizado y especialmente notorio en localidades y comarcas donde la crisis se ha llevado por delante sus industrias tradicionales, como en la zona de Villacañas (Toledo) con el cierre de las fábricas de puertas, explica Vicente Jiménez, de CCOO-Industria Toledo pero reconoce que “salvo en las explotaciones familiares, los vendimiadores siguen siendo muy mayoritariamente extranjeros, sobre todo rumanos”.
Salarios dispares según las provincias
Pero si se consiguió erradicar cierta problemática, el sindicato pone otra sobre la mesa y exige a los empleadores “honestidad y respecto a la legislación laboral”. Y es que tienen que recuerdan que deben cotizar las jornadas “reales” de trabajo y “pagar lo que marca el convenio colectivo de referencia en cada provincia”, subraya Ángel León, secretario general de CCOO-Industria en la región.
El sindicato ha detectado que en dos localidades limítrofes pero de distinta provincia, un vendimiador cobra casi diez euros menos diarios que otro. Algo que califica de “impresentable” y creen que “ no tiene ningún sentido ni para el empresario ni para el trabajador”.
En concreto, este año el salario de campaña en Toledo es de 57,7 euros días. En Albacete asciende a 52, en Cuenca se queda en 49,9 y en Ciudad Real, en 49,37. “No hay ninguna razón que justifique estas diferencias. Hay que avanzar hacia la equiparación; estoy convencido de que muchos empresarios están de acuerdo con que esta situación favorece a unos frente a otros, aunque tengan las viñas unas juntas pagan dos salarios diferentes”, asegura León.
Por eso, CCOO emplaza a ASAJA Castilla-La Mancha “a avanzar” hacia la negociación de un convenio regional del campo porque “en esta campaña sigue habiendo cinco convenios provinciales, y los empleadores deben cumplirlos y los trabajadores deben conocerlos”.
El sindicato está distribuyendo hojas informativas sobre la jornada de trabajo, salarios, recomendaciones sobre los contratos de trabajo y alta en la Seguridad Social, alojamientos para los trabajadores inmigrantes o que se desplacen largas distancias desde su domicilio habitual, prevención de riesgos laborales y posibles irregularidades en materia laboral.
Un servicio para denuncias anónimas
Además, CCOO Castilla-La Mancha mantiene su campaña contra los abusos y la explotación en las campañas agrícolas, un servicio de consulta y de denuncia on-line, totalmente anónimo. “A lo largo del verano estamos atendiendo consultas pero, afortunadamente, no hay denuncias, al menos no de situaciones que podamos calificar de graves”, señala por su parte Lola Santillana, secretaria de Empleo y Migraciones de CCOO Castilla-La Mancha.
26.000 trabajadores en la recolección
Este año, alrededor de 26.000 personas trabajarán este año en Castilla-La Mancha en la vendimia, con una media de 20 jornadas dedicadas a la recogida de la uva. En algunas zonas de la región la recolección ya ha comenzado, en otras arranca este fin de semana y se prolongará durante unas tres semanas, aunque será más corta en algunas comarcas, sobre todo de la provincia de Toledo.
Ciudad Real, con más de un tercio del viñedo de Castilla-La Mancha, es la provincia que requerirá más trabajadores, entre 11.000 y 12.000. Albacete empleará a otros 5.500; Toledo unos 4.500 y una cifra similar Cuenca; más algunos cientos Guadalajara, con pocas y pequeñas explotaciones.
“En total, calculamos en torno a medio millón de jornadas de trabajo, con una media de 20 días por vendimiador”, indica Ángel León, quien subraya “la importancia económica, laboral, social e incluso cultural de la vendimia en Castilla-La Mancha”.
Vendimia cada vez más mecanizada
Un impacto aún más relevante sobre la vendimia, dice el sindicato, es la progresiva mecanización de la recogida de la uva, que rebaja las necesidades de mano de obra. De hecho, y aunque en algunas localidades de la región ya se ha iniciado la vendimia de las variedades más tempranas de uva, como la Chardonnay, la moscatel y la savignon blanc, de momento se está empleando poca mano de obra porque el cultivo en espaldera ha favorecido la mecanización.
Respecto a la producción, Cooperativas Agroalimentarias prevé que esta campaña será similar a la anterior y rondará los 25 millones de hectolitros de vino y mosto, más de la mitad de total nacional, que alcanzará los 46 millones de hectolitros. Por su parte, la patronal Asaja considera que, debido a la sequía, la producción en la región será algo menor que el año pasado y se situará en torno a los 23 millones de hectolitros. Coincide con las Cooperativas en que será de “gran calidad”.