La dirección de Radio Televisión de Castilla-La Mancha emitió en directo un comunicado en el que anunció que pediría al Ministerio Fiscal que investigase la autoría de las grabaciones “a escondidas y de manera irregular”. El equipo de Ignacio Villa afirmo que los audios fueron editados para “beneficio y utilidad propios”, por lo que constituyen la violación del secreto de las comunicaciones, según la Constitución española.
En este sentido, la dirección alegó también la posible nulidad de las pruebas utilizadas por la Inspección de Trabajo, al vulnerarse derechos fundamentales, y acusó, si bien de forma “presunta, al Comité de Empresa de la cadena pública de ser los responsables de difundir y ”manipular“ las grabaciones ”para beneficio propio“.
El Comité de Empresa ha exigido que la empresa pública se disculpe y rectifique las declaraciones hechas públicas. Los trabajadores niegan haber grabado, difundido, manipulado o editado los archivos que se hicieron públicos y señalan que el comunicado de la empresa “no va a ninguna parte”. Además, el Comité ha observado que es “curioso” que la cadena no haya negado los hechos.
El colectivo de trabajadores ha vuelto a exigir la apertura de un expediente disciplinario a la directora de informativos de la cadena, Victoria Vigón, sobre todo después de la resolución de la Inspección de Trabajo que afirman “certifica” los hechos que los trabajadores de la cadena han ido denunciando. En el caso de no abrirse dicho expediente, el Comité exige que se cese de forma “inmediata” a la también presentadora de las noticias del mediodía de la cadena.
La rectificación que exigen, debe emitirse en los mismos medios por los que se difundió el comunicado de empresa, según señalan, y han afirmado que se “avergüenzan” de la actitud que ha tomado la dirección de la cadena pública. Afirman que el equipo liderado por Ignacio Villa ha preferido “apoyar” el comportamiento “indigno y vejatorio” de Victoria Vigón, en lugar de “proteger y defender” a los trabajadores de la empresa.
El Comité de Empresa acusa también a la dirección de RTVCM de no sólo no intentar poner solución a los problemas de “maltratos y desprecios” que han denunciado recibir quienes trabajan en la cadena pública durante los últimos cuatro años, sino de también “amenazar e intentar amenazar” a los trabajadores. Esto, aseguran es un modo de “coaccionar la libertad y los derechos de los trabajadores”. Además, afirman que si no se rectifican las acusaciones, estos representantes no descartan emprender acciones legales en contra de la dirección.