Erasmus Rural: una oportunidad más para frenar la despoblación

Realizar prácticas remuneradas en empresas, instituciones y asociaciones del medio rural. Esto es lo que permite el programa UCLM Rural conocido popularmente como Erasmus Rural, una iniciativa del Vicerrectorado de Innovación, Empleo y Emprendimiento de la Universidad de Castilla-La Mancha que este año celebra su segunda edición. 

Una propuesta en la que este año participan 39 estudiantes de todo el conjunto regional de los que diez se encuentran en la provincia de Cuenca. Concretamente, los jóvenes se han desplazado hasta las localidades de Beteta, Villar de Olalla, Buenache de Alarcón, Villanueva de la Jara, Huélamo, El Provencio, San Lorenzo de la Parrilla, Horcajo de Santiago y Campillo de Altobuey donde se encuentran realizando prácticas en empresas, ayuntamientos o cooperativas de diversa índole. 

Así, por segundo año consecutivos se han establecido lazos de colaboración entre la UCLM y las entidades receptoras de estos alumnos que tienen la oportunidad de incorporar a personas con talento y formación al medio rural al tiempo que los estudiantes completan su formación. 

Este es el caso de Rocío Gutiérrez Moral y José Antonio Carpio Belmar, una estudiante de segundo curso del Grado en Enfermería y un recién graduado en Relaciones Laborales que no han dudado en lanzarse a la piscina y embarcarse en esta gran experiencia. 

Villar de Olalla

José Antonio Carpio acaba de graduarse en Relaciones Laborales en la Facultad de Ciencias Sociales del Campus de Cuenca y no ha querido dejar pasar la oportunidad de aumentar su currículo con este programa de prácticas. Su destino ha sido la empresa Cárnicas Frivall situada en el municipio conquense de Villar de Olalla donde “estoy ampliando y poniendo en práctica todo lo que he aprendido durante los cuatro años de carrera”, asegura. 

En su caso no le importaba demasiado que fueran o no prácticas remuneradas sino que está centrado en ganar experiencia. En este sentido, invertirá tres meses en esta empresa cárnica y en su caso “estaría encantado de quedarme a vivir en un pueblo” por eso cree que “el Erasmus Rural es una gran oportunidad para arraigar población joven en los pueblos y luchar así contra la despoblación del medio rural, que al fin y al cabo es uno de los objetivos prioritarios del proyecto. 

Buenache de Alarcón

La segunda de las protagonistas es Rocío Gutiérrez, una joven jienense que acaba de terminar el segundo curso del Grado en Enfermería en el Campus de Ciudad Real pero que, actualmente, está en el Centro de Salud de Buenache de Alarcón completando un periodo de prácticas de tres meses enmarcado dentro de UCLM Rural. 

Conoció la convocatoria a través de un correo electrónico informativo de la Universidad y desde el primer momento le llamó la atención la propuesta. Si bien, en ciertos momentos ha echado en falta ayuda por parte de los promotores ya que encontrar alojamiento en Buenache de Alarcón ha sido “complicado” y en algunos momentos se ha llegado a sentir “sola y perdida”. 

Sin embargo, de esta experiencia se lleva una parte “muy positiva” como “aprender a gestionar un consultorio local con las limitaciones que hay en el medio rural”. Y es que, al fin y al cabo se trata de eso, de conocer la realidad de estas zonas despobladas que estos jóvenes tienen la oportunidad de cambiar en un futuro cercano cuando salgan al mercado laboral.

En esta línea, su experiencia no está siendo frenética en cuanto a atender urgencias o patologías graves pero sí que ha tenido la oportunidad de practicar diferentes técnicas y tramitar derivaciones a centros hospitalarios más grandes. “Facilitas la vida de los vecinos que en Buenache de Alarcón tienen una media de edad de 75 años y la atención es muy cercana con ellos”, asegura. 

Por todo esto, ambos estudiantes recomiendan al resto de universitarios vivir la experiencia del Erasmus Rural ya no solo para ganar experiencia y completar los periodos de prácticas obligatorios, sino para conocer de cerca la realidad de empresas, instituciones y organizaciones de la provincia de Cuenca que necesitan de jóvenes con talento para hacer frente a la falta de relevo generacional y dinamizar así los pequeños municipios.