Las pinturas rupestres del conjunto de abrigos rupestres de La Rendija en Herencia (Ciudad Real) y las Botargas de Guadalajara son los nuevos Bienes de Interés Cultural que se han aprobado en Consejo de Gobierno. Lo hacen en las categorías de zona arqueológica y de bien inmaterial. El abrigo rupestre se encuentra ya “totalmente rehabilitado” tras los ataques vandálicos sufridos en enero de este año, causados por menores que fueron detenidos y pasaron a disposición de la Fiscalía de Menores de la zona.
La consejera de Educación, Cultura y Deportes, Rosana Rodríguez, ha resaltado que el Gobierno regional está en contacto “permanente” con el alcalde de Herencia y también con la persona dueña del terreno, que es privado. “Abogamos por lo fundamental, que es la mentalización y sensibilización ante estos bienes que son de interés cultural y que pertenecen a toda la humanidad,. Han permanecido en el tiempo miles de años y nuestra obligación es preservarlo”, resaltó.
El Abrigo de La Rendija es una gruta natural abierta en la sierra de Herencia. Tiene 17 metros de ancho, ocho metros de profundidad máxima y un metro de altura como promedio. Atesora en sus paredes interiores y en su techo unas valiosas pinturas rupestres de tipo esquemático en negro y rojo.
Destaca, sobre todo, un importante número de figuras antropomorfas, en las que se pueden apreciar hasta pequeños detalles como los dedos de las manos y pies. Igualmente, aparecen dibujados diferentes tipos de animales como por ejemplo un bóvido de gran tamaño.
Rodríguez ha recordado que su estado de conservación es bastante “óptimo” y ha advertido de que “no se puede poner límites” al campo. “Por eso es importante que hagamos estas campañas de sensibilización”, explicó.