Tortilla con espaguetis y gambas, de verduras variadas, de bacalao con membrillo, de ajetes tiernos y langostinos, de morcilla y panceta, de pimientos y cebolla caramelizada, de pulpo o rellena de salsa brava. Y así hasta más de cien variedades de tortilla se podrán degustar del jueves 18 al domingo 21 de mayo en la que será la II Ruta del Pincho de Tortilla, evento organizado por la Agrupación Provincial de Hostelería y Turismo de Cuenca en el que, tras la excelente aceptación del pasado año, participan un total de 27 establecimientos hosteleros, 20 de la capital y el resto de la provincia (Cañete, Jábaga, Landete, Talayuelas, Valverde de Júcar y Vega del Codorno).
El objetivo, cuenta el gerente de la agrupación, Francisco Ruiz, es aprovechar un producto “muy popular y muy español” para atraer al público conquense a los bares y restaurantes y que, sobre todo, roten por varios de ellos. “Existe la costumbre de visitar el bar cercano a casa o al trabajo y gracias a esta ruta la gente se anima a frecuentar otros locales y descubre sitios nuevos que luego vuelve a visitar”, explica Ruiz, que además destaca el hecho de que, al tratarse de pinchos consistentes, “con tres se come o se cena”.
El Secreto de la Catedral, La Siesta, Bogart, Bien Porteño, La Cuadrilla o El Vivero son algunos de los locales que participarán ofreciendo un pincho diferente cada día a un precio de 1,50 euros en un evento que cuenta entre sus patrocinadores con el Gobierno regional, el Ayuntamiento de Cuenca, Diputación y Cervezas Alhambra, y que se está promocionando a través de 300 carteles y 6.000 dípticos distribuidos por la provincia.
La feria llega además en un momento en el que los hosteleros reconocen “un repunte” importante en el consumo en bares y restaurantes, aunque “no es ni de lejos el de hace años”, en palabras de Ruiz, que sí considera que los fines de semana son “buenos” pero lamenta que los días de entresemana sean “muy flojos”.
Sexto evento gastronómico del año para conseguir la Capitalidad
La II Ruta del Pincho de Tortilla es el sexto evento organizado por la asociación de los once previstos en un año muy especial, ya que en septiembre se conocerá el nombre de la ciudad española que logra el título de Capital Gastronómica, al que Cuenca aspirará por segundo año consecutivo.
A este seguirá, ya en junio, del jueves 15 al sábado 17, la celebración del Día Mundial de la Tapa, en el que los establecimientos que se inscriban prepararán una tapa especial.
Y, apenas unas semanas después, llegará el gran evento de la agrupación, la Semana de la Tapa, que este año se celebrará del 4 al 8 de julio en el habitual escenario del parque de San Julián y ofrecerá “cosas especiales” para celebrar su décimo aniversario. Aunque Ruiz no ha querido adelantar sus contenidos, señala que habrá una presencia de “resonancia europea” con la que se pretende tener eco internacional y contribuir a promocionar Cuenca como Capital Gastronómica.
El año se cerrará en diciembre con un evento gastronómico que, por primera vez, tendrá un carácter solidario.
Tortilla con espaguetis y gambas, de verduras variadas, de bacalao con membrillo, de ajetes tiernos y langostinos, de morcilla y panceta, de pimientos y cebolla caramelizada, de pulpo o rellena de salsa brava. Y así hasta más de cien variedades de tortilla se podrán degustar del jueves 18 al domingo 21 de mayo en la que será la II Ruta del Pincho de Tortilla, evento organizado por la Agrupación Provincial de Hostelería y Turismo de Cuenca en el que, tras la excelente aceptación del pasado año, participan un total de 27 establecimientos hosteleros, 20 de la capital y el resto de la provincia (Cañete, Jábaga, Landete, Talayuelas, Valverde de Júcar y Vega del Codorno).
El objetivo, cuenta el gerente de la agrupación, Francisco Ruiz, es aprovechar un producto “muy popular y muy español” para atraer al público conquense a los bares y restaurantes y que, sobre todo, roten por varios de ellos. “Existe la costumbre de visitar el bar cercano a casa o al trabajo y gracias a esta ruta la gente se anima a frecuentar otros locales y descubre sitios nuevos que luego vuelve a visitar”, explica Ruiz, que además destaca el hecho de que, al tratarse de pinchos consistentes, “con tres se come o se cena”.