La ecología es uno de nuestros principales intereses y es el centro de este blog: cambio climático, medio natural, desarrollo sostenible, gestión de residuos, flora y fauna, contaminación y consumo responsable, desde el punto de vista de periodistas, expertos, investigadores, especialistas y cargos públicos. También editamos la revista 'Castilla-La Mancha Ecológica'.
Consumir legumbres no importadas: una cuestión de sostenibilidad
El consumo de legumbres ha sido un icono y un sello de distinción de nuestra saludable dieta mediterránea, pero en las últimas seis décadas ha descendido en España hasta alcanzar frecuencias preocupantemente bajas, en torno a una ración semanal, y lejos del mínimo propuesto de cuatro raciones semanales.
Además de esta mala noticia, relacionada con la salud poblacional, se añade el impacto ambiental y el sinsentido de basar la producción de legumbres principalmente en la importación.
Diego Rubiales destaca que se importan el 85% de las alubias (la mayoría, de Argentina), el 75% de los garbanzos (sobre todo de Turquía y de México) y el 65% de las lentejas (el grueso de Canadá).
¿Tienen sentido estos datos, siendo nuestro país uno de los principales productores de legumbres en Europa? ¿Tiene sentido que unas lentejas recorran hasta 10.000 kilómetros para llegar a nuestro supermercado, cuando hay productores con alimentos de calidad que están sufriendo la depreciación de sus habichuelas?
Los tratados de libre comercio, principales responsables
Los tratados de libre comercio establecidos en Europa, como el TTIP con Estados Unidos, o el CETA entre Canadá, tienen parte de la responsabilidad, ya que desde el prisma puro del capitalismo neoliberal solamente se barajan términos de rendimiento económico y no de sostenibilidad, justicia alimentaria, o lógica básica. Una de las críticas más duras a estos tratados ha sido bajar el umbral de control alimentario, ya que la regulación europea es más exigente y proteccionista, que la estadounidense o la canadiense en materia de control y calidad alimentaria.
En cuanto al CETA, un tribunal multilateral podría admitir demandas de inversores privados contra Estados, que podrían incluir temas agrarios como la prohibición de productos fitosanitarios u otros temas donde la legislación europea es más estricta al aplicar el principio de precaución. En el foro de cooperación se discutiría como armonizar normativas sobre cuestiones científicas, técnicas y de reglamentación. Lo que supone un control y poder evidente de multinacionales para legislar sobre la soberanía alimentaria de numerosos países.
Pero nosotros una vez más, como consumidores podemos ejercer un voto importante, no una vez cada cuatro años, sino tres y cuatro veces a la semana, comprobando el origen de las legumbres que compramos, y actuando en consecuencia. Aunque tengamos que pagar algo más por legumbres producidas en el ámbito nacional, también son más ecológicas que las canadienses o las americanas.
Sobre este blog
La ecología es uno de nuestros principales intereses y es el centro de este blog: cambio climático, medio natural, desarrollo sostenible, gestión de residuos, flora y fauna, contaminación y consumo responsable, desde el punto de vista de periodistas, expertos, investigadores, especialistas y cargos públicos. También editamos la revista 'Castilla-La Mancha Ecológica'.