El Gobierno de Castilla-La Mancha ha anunciado que pondrá en marcha un Plan para hacer frente al fenómeno de la pobreza energética. Se trata de uno de los puntos incluidos en el Acuerdo de Investidura firmado con Podemos y, debido a la cercanía del invierno, se ha querido “acelerar” la negociación y se ha terminado de concretar un plan. “Funcionará de forma eficaz, y lo será también de manera muy sensata y consensuada”, anunció Emiliano García-Page, presidente de la Junta de Comunidades.
Aurelia Sánchez, consejera de Bienestar Social, anunció que el plan está dirigido a un conjunto de familias que se encuentran en situación de “pobreza severa” y que tienen problemas a la hora de pagar los suministros energéticos en la etapa invernal. “El plan se circunscribe dentro de una estrategia mayor, una estrategia de lucha contra la pobreza. Es el primer plan de este tipo que se crea en Castilla-La Mancha”, aseveró Sánchez, quien señaló que el programa contará con dos medidas “importantes”.
Por un lado, el Gobierno de Castilla-La Mancha creará ayudas contra la pobreza energética, a las que destinará 1,5 millones de euros, y está dirigido a unas diez mil familias, que son las que se prevé se encuentran en una situación grave a la hora de pagar las facturas relacionadas con la energía. Cruz Roja será la encargada de ayudar en la tramitación de estas subvenciones, al ser una institución reconocida y que puede ayudar a “evitar” la burocracia a la hora de entregar las ayudas. La aprobación del decreto para subvencionar Cruz Roja se hará a partir de diciembre, y los pagos llegarán en 2016, cuando se envíen las facturas correspondientes a diciembre.
Por otro lado, la Junta de Comunidades firmará un acuerdo con las empresas suministradoras de energía en la región, algo que coordinarán las direcciones provinciales de bienestar social. Serán los técnicos de la consejería quienes valorarán la población diana de estas ayudas, que requerirán de un informe previo para que las familias puedan incluirse en este grupo. El Gobierno todavía está cerrando los términos con las empresas energéticas, pero se ha llegado a un acuerdo para los meses de invierno. Quienes firmen también recibirán una “contraprestación” debido al “compromiso social” que significa esta medida.
José García Molina, de Podemos, ha señalado que es “motivo de satisfacción” el inicio de este plan, que ha suscrito dentro del Plan de Rescate Ciudadano planteado por su formación desde sus inicios. “Las sociedades avanzan y se desarrollan cuando son capaces de convertir las necesidades básicas de la ciudadanía en un derecho”, aseguró el parlamentario regional. García Molina ha señalado que se debe garantizar el suministro para todas las familias y empezar así la senda para que finalmente el acceso a la luz o la calefacción se “acabe convirtiendo” en un derecho. Además, el diputado ha señalado que esta medida es un “punto de partida” para que se asienten los pilares para limitar los índices de pobreza y desigualdad de Castilla-La Mancha. “Construir una región más igualitaria y justa. Entendemos este plan no como una medida de caridad, sino como el camino que hay que ir transitando”.
Finalmente, Emiliano García-Page ha querido puntualizar que este Plan es un planteamiento excepcional, una mdida para empezar a trabajar para que “no sea necesario en el día de mañana”. “El objetivo es que la sociedad disponga de un colchón básico, que nos permita hablar de una sociedad moderna, en la que todos acceden a cosas tan básicas como la luz”, aseguró el presidente de la Junta de Comunidades. Sin embargo, el socialista quiso también resaltar que no se está llamando a los impagos, ni tampoco que la Junta de Comunidades pagará las facturas. “Hay un filtro de absoluta seriedad a través de los servicios sociales. Lo que no aceptamos es que durante invierno la gente no pueda ni calentarse”, señaló Page.