El mercado de la vivienda sigue sin dar señales de recuperación en Castilla-La Mancha

Tras un mes de enero malo con una reducción del 3,9% en la compraventa de viviendas en Castilla-La Mancha respecto del mismo mes de 2014 y un mes febrero en que se produjo un esperanzador crecimiento en las transmisiones de viviendas de un 8,6%, aunque muy por debajo del 15,5% estatal, el mes de marzo arroja un dato menos positivo.

Mientras la compraventa de viviendas se incrementó en España en un 2,1%, en Castilla-La Mancha se registró tan sólo un aumento del 1,4% según los datos publicados por el INE, a partir de los ofrecidos por los Registros de la Propiedad, que no permiten hablar por ahora de recuperación en el mercado de la vivienda.

En concreto en Castilla-La Mancha se transmitieron en marzo 1.150 viviendas, de las cuales 990 eran libres y tan sólo 160 con régimen de protección pública, tendencia que ya se dio en 2014. Las viviendas usadas transmitidas fueron 837 frente a 313 de obra nueva, una proporción que mejora la que se produjo el ejercicio anterior.

Continúa la atonía de 2014

En 2014 según el INE la compraventa de viviendas se incrementó en España en un 2,2%, la primera subida en cuatro años, sin embargo en Castilla-La Mancha, lejos de recuperarse, se produjo un descenso del 12,62 % respecto de 2013. Solo La Rioja, con un descenso del 25,1%, tuvo peor resultado que nuestra comunidad en toda España.

La venta de vivienda nueva fue un 32,52% menor en 2014 que en 2013, lo que en parte se explica porque a efectos estadísticos el INE considera vivienda usada la que tiene más de dos años y las que han pasado a manos de los bancos como consecuencia de promociones fallidas. Por el contrario la transmisión de vivienda usada es el único dato positivo, ya que se incrementó en un 7,8% en 2014.

Las bajadas de precio, tanto en vivienda usada como nueva, y las promociones de los bancos para dar salida a su stock no consiguieron animar el mercado por el difícil acceso al crédito, especialmente en una región donde el desempleo permanece en niveles muy elevados con especial incidencia entre los jóvenes.