La Junta de Castilla-La Mancha insiste: la formación para mujeres en Tomelloso “solo ofrece labores estereotipadas”

“No tenemos nada en contra de que se hagan talleres de costura, cocina o cursos de confección”, explicaba la consejera portavoz de Castilla-La Mancha, Esther Padilla, en referencia a la polémica levantada por la oferta formativa “para mujeres” de Tomelloso, un ayuntamiento en el que gobierna el PP con Vox. Se trata de una oferta titulada “Actividades para mujeres”, que incluye cursos de cocina y alimentación, confección, manualidades, restauración y tapicería, tal y como se ha publicitado desde el municipio ciudadrealeño.

El problema, ha abundado la consejera, es que sean estas las actividades dirigidas “solo para mujeres”. “El cartel es muy llamativo. Es para las mujeres y se hace selección de actividades muy sesgadas”, ha señalado en rueda de prensa.

En la misma línea se ha manifestado la consejera de Igualdad, Sara Simón, que ha insistido en que no se critican las actividades como tal, pero sí que las políticas de igualdad se “reduzcan a esto” y que lo que se presten sean “estos cursos”. Además, ha contestado al alcalde del municipio, el 'popular' Javier Navarro, que señalaba que los cursos ya se hacían cuando gobernaba el PSOE en Tomelloso, diciéndole que efectivamente ya se ofrecía la formación, pero que “el problema es que el ayuntamiento lo único que hace son estos cursos”.

De esta manera, continuó Simón, “lo que hacemos es dejar de trabajar en una sociedad igualitaria y más justa”. “Lo que le decimos a las mujeres es que solo se ofrecen labores estereotipadas del hogar. Es lo que hacemos cuando las únicas políticas dirigidas a mujeres sean estas”, señalaba Simón. “Otra cosa”, resaltó, sería que la oferta se hubiera complementado con otras actividades o programas, y que se pudiese apuntar “cualquier persona”, zanjó.

Los cursos también han sido criticados por el sindicato CCOO, desde donde han lamentado que este tipo de oferta formativa es una “muestra más” de cómo quieren devolver “a la mujer a las tareas del hogar del franquismo”. Desde el sindicato afirman también que esta oferta formativa “vulnera la obligación de los poderes públicos de promover la igualdad real y efectiva”. “Está claro que a la derecha y ultraderecha es el espacio en el que más les gusta tener a la mujer”, ha criticado Rosario Martínez, secretaria regional de políticas de Mujer de la organización.