El Ministerio de Sanidad ha prohibido el baño en dos zonas de Castilla-La Mancha durante este verano. Según adelantaba Toledodiario.es, el pasado 19 de junio ya se recomendaba evitar el baño en el río Alberche en la localidad toledana de Escalona y el 31 de julio se prohibía temporalmente esta práctica debido a la “posible contaminación microbiológica” que presentan sus aguas en este tramo. La prohibición se debe en este caso a la superación de los límites establecidos de niveles de enterococos intestinales y de Escherichia coli (E.Coli), dos bacterias de origen fecal que pueden llegar a poner en riesgo la salud de los bañistas.
El episodio de prohibición se ha repetido en el río Júcar, en la provincia de Cuenca. En concreto en el embalse de La Toba y por los mismos motivos. Una situación que afectó de lleno a actividades como la ruta en piragüismo para la observación del fenómeno de las Perseidas, según informa Las Noticias de Cuenca.
La responsable de Geodiscover, Irene Prieto, declaraba a este periódico conquense que conoció la situación del embalse por los medios de comunicación dado que “no hicieron ningún comunicado a las empresas, tuvimos poco margen de maniobra, fue una pena que no pudieramos realizar la actividad, pero en esas condiciones era imposible”, señala.
Mientra, el Gobierno regional confía en que se trate de una contaminación “puntual” y que en los próximos días se autorice de nuevo el baño, según ha dicho a Efe el delegado de la Junta en Cuenca, Ángel Tomás Godoy, quien ha indicado que se han realizado nuevos análisis, cuyos resultados estarán en las próximas 48 horas.
La cabecera del Tajo, pendiente de evaluación
El Sistema de Información Nacional de Aguas de Baño (NÁYADE) recoge además otras consideraciones relativas a las zonas de baño en Castilla-La Mancha. Por ejemplo que en la cabecera del Tajo, tanto el embalse de Entrepeñas (Guadalajara) como el de Buendía(Cuenca), en pleno proceso de trasvase de agua a Levante, están pendientes de valoración sanitaria para poder bañarse.
En el caso de Entrepeñas esa valoración no está disponible ni en la zona de Alocén, ni en Durón y Pareja o Buendía, a fecha 6 de agosto. De hecho, en Guadalajara todas las zonas de baño dependientes del río Tajo están a fecha de hoy “pendientes de valoración por la Administración Sanitaria”. En esta provincia, la única zona de baño sobre la que no hay consideraciones (no consta muestreo de sus aguas desde el 29 de agosto de 2016) es la del río Tajuña en la localidad de Abánades.
En la cabecera del Tajo, pero en la parte de Cuenca, ocurre lo mismo con el embalse de Buendía. Su estado se encuentra pendiente de valoración sanitaria. También en el sistema del Tajo, ya en la provincia de Toledo, permanece pendiente de evaluación el embalse de Cazalegas y no hay datos sobre el embalse de Rosarito, en Oropesa. El muestreo, según consta en la web de Náyade está “sin notificar”.
Mientras, las lagunas de Villafranca de los Caballeros, en la cuenca del Guadiana, también en la provincia de Toledo, son las únicas declaradas aptas para el baño a fecha 7 de agosto.
Ciudad Real, única provincia con todas sus zonas aptas
Ciudad Real es la única provincia de la región con todas sus zonas de baño aptas para el público, tanto las Lagunas de Ruidera como el pantano de Carboneras, en Brazatortas y el río Bullaque, tanto en El Robledo como en Piedrabuena.
En Albacete hay cinco lagunas en Ossa de Montiel (La Colgada, La Salvadora, San Pedra, Santo Morcillo y La Tomilla) aptas para el baño pero, en esta misma localidad la Laguna La Redondilla está sin calificar desde mayo de 2016
Además, el río Júcar a su paso por la localidad de Alcalá del Júcar está pendiente de valoración sanitaria.
El SESCAM solo actualiza datos cada quincena
La Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha sólo actualiza datos cada quince días, así que no es posible la consulta en tiempo real sobre las zonas de baño. Es la Dirección General de Salud Pública y Consumo de la Consejería de Sanidad la que lleva a cabo el Programa Regional de Vigilancia Sanitaria de las Aguas de Uso Recreativo, que se ejecuta a través de las secciones responsables de Salud Ambiental y los distritos de Salud Pública.
Cada inspección conlleva una calificación de carácter sanitario tanto de la playa como del agua de baño, pero Sanidad solo emite informes de la calidad de las aguas con una periodicidad quincenal y hasta que finalice la temporada de baño, el 15 de septiembre.