El fiscal superior de Castilla-La Mancha, Emilio Fernández, ha apuntado que los casos de sumisión química sufridos por mujeres que han sufridos pinchazos en la Comunidad Autónoma no son una preocupación debido a que los pocos denunciados se deben a “actuaciones de bromistas” y que en ningún caso han culminado con abuso sexual.
A preguntas de los medios, durante su comparecencia para informar sobre la Memoria 2022, Fernández ha indicado que estos casos de pinchazos de “bromistas” no han derivado en “introducción de sustancias o elementos químicos” en los cuerpos de las mujeres “que pudieran tener propósito y un ataque ulterior a la libertad sexual”.
Por ello, considera que la legislación “es suficiente”, tras lo que ha pedido a la población “no caer en miedo injustificado”, ya que “hay otras formas de sumisión más frecuentes que las del pinchazo”, como el abuso de alcohol.