El 'yihadismo' internacional es un tema de actualidad a raíz de que se produjese el atentado contra la sede de la revista satírica francesa Charlie Hedbo en París. En nombre de Alá y con las armas como argumento, los yihadistas, radicales islamistas, están sembrando el pánico en muchos países de Oriente Medio con la religión como excusa para ejecutar asesinatos, terror y caos.
La actualidad ha coincidido en esta ocasión con unas actividades programadas anteriormente en Albacete con motivo de las charlas que han acercado temas de muchas índoles por parte del colectivo Europa Laica a los vecinos de la capital. Entre ellos, el Ateneo albacetense recibía a Waleed Saleh, profesor de Estudios Árabes e Islámicos de la UAM, quien ha acercado el islamismo, en todas sus vertientes (social, política y religiosa) a la ciudadanía albaceteña. “La inmensa mayoría de la gente normal no tiene ni idea de lo que son estas cosas y eso es lo que es importante”, cuenta el profesor de la Autónoma de Madrid, quien apunta que los atentados, los actos violentos que durante más de dos días mantuvieron en vilo a los franceses, no surgen de la nada: “esto que ha sucedido en Francia es la chispa de lo que viene pasando en los últimos años”. Se refiere a la radicalización que en nombre de la religión determinados grupos violentos llevan por bandera, y por la que cientos de personas mueren en países como Yemen, Siria o Pakistán. Países que quedan lejos y cuyos muertos se cuentan por decenas sin más nombres y apellidos.
Pero Waleed Saleh advierte de que no hay que confundir islam con 'yihadismo', un error común en occidente, según cuenta. “Hay errores sin ninguna duda porque sabemos que el islamismo es una de las grandes religiones; tiene dos caras, una violenta y la otra cara es la amable, la fraternidad, el amor, la convivencia”. Mantiene y reitera que los yihadistas son una pequeña minoría, “una minoría de la minoría”, luego no representan los valores de la religión que dicen defender.
El profesor de la UAM señala además que cuando se habla de la comunidad musulmana, de los musulmanes, se generaliza a vecinos de países distintos, señalándolos únicamente por su creencia o religión, incluso cuando puede tratarse de laicos o no practicantes del islam. “Cuando hablamos de comunidad musulmana, de musulmanes, esta insistencia en la procedencia por su religión no es correcta, deberíamos suavizar el lenguaje que usamos, ¿por qué razón hacer tanta insistencia? ¿por qué no hablamos de las procedencias de cada cual, por qué no hablamos de pakistaníes, afganos, etc.?”.
Saleh plantea que el mayor reto ahora es hacer frente al terrorismo global con una respuesta global. “Todos los días mueren en Yemen, Siria, Pakistán, cientos de personas, son los mismos asesinos pero con diferentes argumentos, ellos atacan donde pueden, lo hacen en todas partes”. Un planteamiento conjunto que debe ponerse sobre la mesa en lo que a la integración se refiere, una asignatura pendiente según el ponente, también en Francia donde asegura que se ha hecho una política de integración “no demasiado adecuada para los inmigrantes pero no podemos hablar de un fracaso. Hay más de cinco millones de inmigrantes en Francia y no es justo que se les estigmatice a todos, que se generalice”, concluye Waleed Saleh no sin antes advertir que los partidos políticos de derechas “se van a aprovechar de estas circunstancias y tomarán medidas, y habrá acciones violentas contra el islam”.