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La Junta de Castilla y León patrocinó el curso del 'think tank' de Vox con 15.000 euros y el contrato lo firmó el nieto de Blas Piñar

Santiago Abascal y Marion Maréchal en un fotomontaje con parte del folleto del ISSEP

Laura Cornejo

Valladolid —

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El procurador de Ciudadanos, Francisco Igea, ha denunciado este viernes en la comisión de Cultura y Turismo el contrato de la Fundación Siglo con el “Instituto Superior de Sociología, Economía y Política” (ISSEP), la supuesta institución académica fundada en 2018 por Vox y Marion Maréchal, la nieta del ultraderechista fundador del partido Frente Nacional francés, Jean Marie Le Pen. “La nación: pasado, presente y futuro”, que se celebró en Segovia el los pasados 15, 16 y 17 de septiembre, consiguió un patrocinio de 15.000 euros iva incluido del gobierno autonómico. “Se trata de un caso de utilización dudosamente legítima y éticamente reprobable del dinero público”, ha denunciado. “Se está promocionando un concepto racista, xenófobo y excluyente de la nación española”, ha añadido tras aludir a vídeos de las ponencias que se llevaron a cabo.

Igea ha advertido que se trata de un curso dirigido por un Instituto cuyo presidente es “un fascista reconocido”, Miguel Menéndez Piñar, que fue quien firmó el contrato de patrocinio con la Fundación Siglo. Menéndez Piñar, nieto del fundador de Fuerza Nueva, Blas Piñar, está condenado por una agresión a un director y autor de una obra de teatro y participa de forma habitual en los actos de exaltación del 18 de julio, tal y como ha demostrado documentalmente durante la comisión el procurador Francisco Igea.

“Durante el pasado curso, financiado por la Junta de Castilla y León se produjeron afirmaciones racistas y xenófobas intolerables en el transcurso de un acto celebrado bajo el patrocinio del gobierno autonómico”, ha informado.

Los folletos y vídeos con el logo de la Junta se difundieron meses antes de la firma del contrato

Además, el coste de las tareas encomendadas “es notablemente superior al precio de mercado habitual” y la firma del contrato, ha advertido, se produjo el 11 de septiembre a pesar de que la utilización del logo de la Junta de Castilla y León apareció en folletos y videos promocionales en julio. Por todo lo cual, el procurador ha afirmado que podría conllevar la posible presentación de una denuncia “para establecer la existencia o no de ilícitos penales tales como fraude o malversación”.

La Fundación Siglo, dependiente de la Consejería de Cultura, en manos de Vox, tiene como objetivo “la financiación y desarrollo de actividades relacionadas con la Lengua, la Cultura, el Pensamiento y las Artes en sus distintas formas de creación y expresión, y, en especial, con la música, la protección, apoyo y aprendizaje del castellano, el patrimonio cultural y los museos con el fin último de contribuir, a través de sus recursos de todo tipo, al progreso de la Comunidad de Castilla y León y al enriquecimiento, disfrute, conocimiento, difusión y prestigio de las manifestaciones culturales y artísticas más relevantes de su historia y actualidad dentro y fuera de su ámbito territorial”. Así, dentro de los fines fundacionales está el apoyo y desarrollo de “iniciativas de interés para el sector turístico, cultural y de la lengua española en el ámbito de la promoción, la comercialización y la gestión de planes de patrocinio y búsqueda de participación de entidades privadas, para la articulación de conmemoraciones y eventos culturales, deportivos o cualesquiera otros que contribuyan al acceso de los ciudadanos a las manifestaciones culturales y artísticas o a la difusión de la Comunidad como destino turístico”.

En el contrato de patrocinio, al que ha tenido acceso elDiario.es, se establece el pago de 12.396,69 euros, 15.000 con iva incluido por colocar el logo de la Junta en varios formatos de promoción. En concreto, por el folleto de presentación del Curso de Verano se pagaron 2.231,40 euros; por un flyer promocional, 1.487,60 euros; por la campaña en redes sociales (Facebook, Twitter, Instagram, Youtube). 2.066,12 euros; por un video promocional. 2.479,34 euros; por una campaña “mediante correo electrónico”, 1.239,67 euros; por “material de entrega a los participantes 1.157,02 euros y por la edición y publicación de las conclusiones de las distintas mesas 1.735,54 euros, todo ello sin iva incluido. Lo llamativo es la escasa repercusión de esas acciones promocionales. Al curso asistieron 100 personas, tal y como cuenta el propio ISSEP en sus redes sociales:

Los vídeos en Youtube apenas acumularon unas decenas de visualizaciones:

Y los vídeos promocionales en redes, de entre 30 y 40 segundos en los que aparece un solo plano del director de ISSEP, Miguel Ángel Quintana Paz tampoco cosecharon mayor éxito, pero sobre todo, Igea planteó si eso cuesta los más de 2.000 euros que pagó la Junta de Castilla y León. “Menos mal que fue un fracaso, porque si la gente hubiese visto las cosas que promociona la marca Castilla y León...”, recriminó. “Este es uno de los casos más palmarios de clientelismo que he visto yo nunca en la administración pública”, ha afeado. Además, ha animado a hacer una búsqueda de quién es Miguel Menéndez Piñar, a quien verán “brazo en alto”. “Eso son ustedes, la Junta de Castilla y León, del Partido de Popular -ha repetido tres veces- y de Vox”, ha señalado

El curso tampoco despertó interés informativo, más allá de una crónica en un medio digital de Canarias, Espiral 21, que relató cómo el El catedrático de Historia Medieval de la Universidad de Cádiz, Rafael Sánchez Saus, a cuyo cargo estuvo la conferencia inaugural y que aludió “al análisis de 500.000 marcadores genéticos estudiados para averiguar que hay grandes grupos genéticos (no raciales) y concretamente el alogrupo R1B, asociado al cromagnon” que es “asombrosamente mayoritario en Iberia y toda la fachada atlántica, incluidas las islas británicas, Irlanda y la costa de Francia, más que con Italia y el Mediterráneo”. El mismo ponente llegó a comentar que “el rasgo fundamental del español es, justamente, tratar al otro como distinto, lo cual viene de la convivencia con Al Andalus, que terminó extendiéndose a su forma de ser con la conquista de América, o de forma anecdótica con la División Azul que cuando llegaba a Rusia siempre caían bien los españoles”. 

La directora general de Políticas Culturales, Inmaculada Martínez Merino, ha defendido ante Igea, que el contrato de patrocinio tiene como objetivo que figure la marca de Castilla y León pero no “en el contenido” de lo que se patrocina, pero que están en fase de análisis de la factura que ha presentado el ISSEP.

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