El Ayuntamiento de Valladolid ha informado este jueves de un brote de gripe aviar detectado por el momento en ocas, con el hallazgo de al menos 21 aves muertas en los márgenes del río Pisuerga --aunque no en todas ellas se ha confirmado la causa--, por lo cual el alcalde de la ciudad ha instado a los ciudadanos a cumplir la prohibición de alimentar a animales en espacios públicos de la ciudad.
El propio regidor, Óscar Puente, ha informado de la situación durante una rueda de prensa que ofrecía este jueves con motivo de la firma del manifiesto de la Alianza de Ciudades Contra la Obesidad.
Según han explicado, a lo largo de la última semana de marzo se constató la presencia, cada vez en mayor número, de cadáveres de ocas en los márgenes del río Pisuerga, en concreto en la isla situada frente al Museo de la Ciencia.
Con la aparición de los primeros animales muertos, los servicios municipales dieron traslado de dicho hecho a la Unidad Veterinaria de la Junta de Castilla y León, que procedió a la toma de muestras de los cadáveres.
Este miércoles, 6 de abril, se ha confirmado que la enfermedad que afecta a estas aves es la Influenza Aviar de Alta Patogenicidad H5N1, declarándose el foco en la mencionada isla del Pisuerga.
Se ha recogido, por parte de la Brigada de Zoonosis, Veterinarios Municipales y Bomberos, un total de 21 aves, que han sido incineradas.
El mismo día 6 de abril se halló un pato muerto en el Campo Grande, por lo que se ha dado aviso a los servicios veterinarios de la Junta de Castilla y León para la toma de muestras, pero todavía no se cuenta con resultados.
Debido a la migración diaria y los movimientos de aves silvestres, entre las márgenes del río donde se ha declarado el foco y el Campo Grande, sumado a la imposibilidad de aislamiento de las aves presentes en dicho parque, los servicios veterinarios municipales están a la espera de los resultados definitivos y la resolución del foco de la isla del Pisuerga y del Campo Grande, aunque a fecha de hoy este caso del pato no está confirmado. El objetivo es evitar la propagación de la enfermedad entre las aves.
Aunque la probabilidad de contagio de la gripe aviar a las personas es escasa, el Ayuntamiento de Valladolid, como medida preventiva, el alcalde ha querido subrayar que la población debe cumplir la normativa que impide la alimentación a los animales con el fin de evitar la propagación de la enfermedad entre las aves que frecuentan los cauces de los ríos y el Campo Grande.
A pesar de que el riesgo de transmisión a personas es escaso, el Ayuntamiento de Valladolid ha insistido en “la cautela y prevención” para el mantenimiento de la salud pública.
El Ayuntamiento, además de informar a la opinión pública a través de las redes sociales y los medios de comunicación, colocará carteles de advertencia en los lugares más frecuentados por las personas, como el Campo Grande.