La gerente regional de Salud, Violeta Martínez, ha señalado que Sacyl aún tiene sin cubrir 100 puestos de médico pese a la contratación de 235 médicos sin MIR, los 238 facultativos que han prolongado la permanencia en el servicio activo y los 58 que han alargado su edad de jubilación. Los médicos de Familia se plantean denunciar al Ejecutivo autonómico por emplear a estos facultativos sin la formación específica.
Martínez ha lanzado estos datos en Segovia, donde ha asistido a una jornada sobre Seguridad al Paciente, un foro en el que se ha referido a las quedas de la Sociedad de Médicos de Familia y de CCOO por la “normalización” sobre la contratación de estos médicos sin especialidad.
Martínez ha reflexionado sobre la situación que se da en el conjunto del país en torno a la carencia de médicos. “Nos enfrentamos a una situación de falta de especialistas en Medicina de Familia, de tal manera que esa falta de profesionales para cubrir una serie de puestos de difícil cobertura es lo que nos lleva a la necesidad de tener que hacer contratación de profesionales licenciados y graduados en medicina que aún no tienen homologado por parte del Ministerio de Educación su titulación o su especialidad”, ha justificado.
Contrataciones firmadas tras comprobar que “no hay posibilidad” de contratar médicos con el MIR
La gerente regional de Salud ha insistido en que estas contrataciones son perfectamente legales y se han llevado a cabo después de comprobar que “no hay posibilidad en estos momento de contratar a médicos con el título de medicina de familia”.
“Lo ideal sería poder disponer de médicos que quisieran ocupar estos puestos de Atención Primaria de difícil cobertura, son puestos del ámbito rural, consultorios locales, recuerden que tenemos en Castilla y León un gran número de consultorios locales, consultorios rurales, algunos de los cuales no podrían seguir en funcionamiento si no pudiéramos garantizar que hay médicos para atender estos consultorios”, ha reseñado.
Así, la gerente ha insistido en que se trata de medidas “temporales, especiales y transitorias” y ha confiado en que en un plazo “razonable” de tiempo el Ministerio de Sanidad convoque más plazas MIR.
El trabajo no es comparable
Las sociedades científicas de médicos de familia de Castilla y León, que han solicitado una reunión “urgente” con la Consejería de Sanidad, consideran que esta situación supone un “desprestigio” para la especialidad y algo “desmotivador e injusto” para los médicos que realizan la residencia.
“Este sistema de contratación se puede perpetuar a capricho de quien lo realiza, justificándolo con la situación de cada momento. Los médicos de Atención Primaria aspiramos a obtener mejoras en las condiciones de trabajo que faciliten la atención que prestamos a nuestros pacientes”, han exigido a través de un comunicado.
La asociación Médicos Unidos por sus Derechos advierte que la atención de un médico con la especialidad no es comparable con la de un facultativo sin ella, y que éste no puede ser responsable de posibles negligencias. “La Consejería de Sanidad debe responsabilizarse de cuantos problemas puedan surgir”, exige.
“Fueron contratados sabiendo que carecían de los conocimientos que se adquieren al hacer la especialidad”, sentencia la asociación a través de un comunicado. Médicos Unidos por sus Derechos considera que esta medida “empeora” el sistema sanitario.
Además, considera que esta medida “devalúa” a la Medicina Familiar y Comunitaria y supone “un agravio comparativo” para los que sí han estudiado la especialidad. Los graduados en Medicina, además, no podrán actuar como tutores ni resolver dudas a los residentes, puesto que carecen de especialidad. “Abogamos por hacer atractiva la Medicina Familiar y Comunitaria con la mejora de las condiciones laborales del colectivo e instamos a la Consejería de Sanidad a reconsiderar su posición”, ha concluido la asociación profesional.