La Junta de Castilla y León se desvincula de la “manipulación” en RTVCyL porque asegura que “no tiene ningún medio público”. El portavoz del gobierno autonómico, Carlos Fernández Carriedo, ha añadido que son “los profesionales quienes diseñan y trabajan ese medio de comunicación, no la Junta de Castilla y León”. Sin embargo, los profesionales de RTVCyL —propiedad del empresario Antonio Miguel Méndez Pozo, y de la familia de José Luis Ulibarri, condenado en Gürtel— han denunciado “manipulación en la información política”
Carriedo también ha animado a que los trabajadores de la televisión “sigan informando con espíritu crítico y atendiendo al interés general y al servicio público que su deontología profesional obliga”.
Radio Televisión de Castilla y León S.A. recibe más de 20 millones de euros al año como concesión directa aprobada por el Consejo de Gobierno. Para 2022, el pasado mes de julio le fue concedida una subvención de 20, 2 millones de euros. La Audiencia Nacional calificó este tipo de subvenciones en 2018 (en sentencia firme) como un contrato de prestación de servicios sujeto a IVA- a la televisión privada que explota su licencia de TDT. La fórmula de la “subvención directa” evita que la decisión pase por control presupuestario o por la Intervención de la Administración.
Carriedo ha recordado que entonces se acordó el acuerdo vigente “sin ningún voto en contra” de los grupos políticos. El PSOE se abstuvo para “garantizar el sueldo a los trabajadores”. El Grupo Mixto, y el grupo UPL-Sora ¡YA! y Ciudadanos también se abstuvieron. Este último partido justificó su voto con el objetivo de “desenquistar” el problema de unos trabajadores “que desde hace meses ven peligrar su sueldo”.
El portavoz del ejecutivo autonómico no ha mencionado de forma expresa a RTVCyL pese a haber sido preguntado por el tema en rueda de prensa. Ha asegurado que la Junta “respeta la profesionalidad de los periodistas, que actúan con objetividad”. “En algunos casos puede ser más con una visión o con otra, y pueden merecer una opinión más o menos favorable”, continuado. Pero, en todo caso, su “misión” es “respetar esa opinión y aceptar la pluralidad informativa”
Ante la posibilidad de acabar con el actual modelo de RTVCyL y crear uno nuevo como piden PSOE y Ciudadanos, Carlos Fernández Carriedo ha defendido que el “esfuerzo de los recursos públicos” se concentren en “ayudar a la gente”. “No está en nuestra visión incorporarnos a esas comunidades que tienen una televisión pública. Y eso nos permite bajar impuestos cuando otros no pueden y tener servicios públicos de mayor calidad que otros pueden tener”, ha terminado.