UGT Castilla y León suspende sus propias elecciones sindicales para sus trabajadores de Palencia

UGT Castilla y León ha suspendido sus propias elecciones sindicales para sus trabajadores de Palencia, que tenían previsto elegir a un delegado de personal a finales de septiembre. En este caso UGT interviene como empresa y empleadora y a la vez como sindicato, puesto que los trabajadores palentinos están afiliados a UGT.

En un escrito al que ha tenido acceso este diario, el secretario de Organización de la directiva autonómica de UGT, Óscar Lobo, comunicó a la Oficina Territorial de Trabajo (OTT) de Palencia que UGT, como empresa, desistía de la celebración del proceso electoral, algo que no puede hacer ninguna compañía, puesto que no puede interferir en las elecciones de los trabajadores. La mesa electoral debía constituirse el 30 de septiembre, pero este escrito fue enviado a la OTT el jueves 26 a las 13.51 horas.

El propio Óscar Lobo explica a elDiario.es que en esta ocasión ha actuado “como sindicato y no como empresa” y asegura que no se trata de una suspensión electoral sino de un aplazamiento que atribuye a una “estrategia electoral”. “Soy el responsable de las elecciones de mi organización. No actúo como empresa”, insiste Lobo, que asegura que se promoverán las elecciones sindicales en Palencia y otras sedes como Salamanca “antes de finalizar el año”.

Los trabajadores no tuvieron noticia de esta decisión hasta después de registrarse el escrito en la OTT, que lo aceptó, pero no dio trámite a este proceso porque las empresas no pueden intervenir en un proceso sindical, según fuentes del sindicato. Lobo asegura que este aplazamiento fue “consensuado” con los trabajadores de UGT.

“Metimos el preaviso en julio. Somos los promotores de las propias elecciones. Y las aplazamos como encaje técnico consensuado con los trabajadores. Se les había notificado antes a los trabajadores, si no no lo hacemos. Si cualquier trabajador hubiera considerado que esto no estaba bien, podría haber constituido la mesa. Fuimos transparentes con los trabajadores”, defiende el secretario autonómico de Organización de UGT, que insiste en que esta decisión estaba “consultada y validada técnicamente”. “Claro que hay un acuerdo verbal. Si no hubiera un acuerdo la cuestión hubiera ido por otros derroteros”, apostilla en declaraciones a este diario.

La otra opción para que estos comicios no se celebraran habría sido que no se constituyera la mesa, pero que Lobo descarta porque la considera “peor”. “Es la primera noticia de que alguien no esté de acuerdo”, apunta Óscar Lobo. Sin embargo, algunos de los trabajadores de UGT consideraron este escrito como una amenaza por parte de la empresa y decidieron no constituir la mesa electoral (compuesta por el trabajadores de más antigüedad y los electores de mayor y menor edad) como estaba previsto. “Si hubiera habido un acuerdo con los trabajadores debería constar en el texto”, aseguran fuentes de UGT consultadas por este diario. El Estatuto de los Trabajadores estipula que si el promotor renuncia a la promoción de unas elecciones (como en este caso), legalmente no se impide el desarrollo del proceso electoral “siempre que se cumplan todos los requisitos que permitan la validez del mismo”.

Las elecciones se dejaron 'morir'

Por lo tanto, se paralizó el proceso y el preaviso electoral se dejó 'morir'. Es decir, se prorroga el mandato del actual delegado de personal (como lleva prorrogado dos años, según Óscar Lobo), porque no llegó ni a establecerse un calendario electoral ni a presentarse ninguno de los trabajadores como delegado de personal. Ni siquiera se sabía oficialmente quién se iba a presentar, porque normalmente no se anuncian las candidaturas hasta que no se constituye la mesa electoral. Si los trabajadores quisieran elegir un nuevo delegado de personal, el proceso debería empezar de nuevo, puesto que el anterior proceso decayó.

El secretario de Organización de UGT Castilla y León reitera que el centro de Palencia tiene una delegada de personal “que ejerce sus funciones plenamente” y que los “derechos y garantías” de sus empleados están “cubiertos”. Lobo es también el responsable autonómico de elecciones sindicales.

Fuentes sindicales consultadas por este diario muestran su incredulidad ante la reacción de la empresa de UGT, puesto que no está permitido que ninguna empresa pueda 'desistir' o intervenir en cualquier proceso electoral de los trabajadores. La empresa, en cualquier caso, debe facilitar el proceso al facilitar el censo y un espacio para las votaciones, por ejemplo.

La Federación de Servicios, Movilidad y Consumo (FSMC) de Castilla y León defiende que este “retraso” se debe a una cuestión “estratégica” de la federación. “Esta circunstancia se traslada a los trabajadores afectados que están de acuerdo con que se retrase, ya que no se suspende, puesto que el proceso se va a realizar en cuanto las circunstancias permitan hacerlo”, asegura a través del responsable de Comunicación. La Federación considera que estos “retrasos” son “habituales” en las empresas “cuando se toma una decisión estratégica dentro de la federación” por motivos como “irregularidad en el censo electoral” o por “esperar a trabajadores cuando se produce una subrogación”.

En febrero de 2023 ya dimitieron la secretaria general del la FeSMC-UGT de Palencia y toda su ejecutiva por una “pérdida de confianza” hacia las comisiones ejecutivas autonómica y federal tras “constantes ataques” después de que apoyaran la candidatura de Victoria Zumalacárregui, que perdió el Congreso —las elecciones internas— frente a las listas de Héctor Yágüez.

Un delegado de personal

El Estatuto de los Trabajadores estipula que cuando una empresa tiene entre seis y diez trabajadores (como es el caso de UGT en Palencia), estos pueden decidir si quieren un delegado de personal, que será elegido mediante un sufragio libre, personal, secreto y directo. Este delegado de personal es el representante legal de los trabajadores ante la empresa.

Responsables de otros sindicatos consultados por este diario explican que un empresario no puede desistir. “Es que no se puede hacer”, insisten. En un proceso ordinario, los trabajadores notifican que quieren elegir al delegado de personal directamente o a través de uno de los dos sindicatos mayoritarios (UGT y CCOO). Y solo se podría revocar el proceso con un escrito de todos los trabajadores. La empresa también podría alegar otras cuestiones de índole legal en la constitución de la mesa, pero no antes. Y menos desistir de un proceso electoral.