Agentes de la Policía Local han detenido a dos hombres de 34 y 70 años como autores de un presunto delito de violencia de género y a una mujer de 43 por la presunta agresión a su madre.
La primera tuvo lugar el lunes 13 de febrero cuando agentes de la Policía Local fueron comisionados para personarse en una de las calles de la capital burgalesa al haberse producido una agresión dentro del ámbito familiar. En el lugar, los agentes encontraron al hijo de la pareja, menor de edad, asegurando que sus padres habían mantenido una fuerte discusión en la que se había producido una agresión mutua. En el domicilio y junto a él, se encontraba su padre, ya que su madre había abandonado la vivienda para dirigirse a comisaría a interponer denuncia por los hechos.
Por su parte, el varón, que presentaba un enrojecimiento en el labio, manifestó que las discusiones son frecuentes y las agresiones mutuas también. En esos instantes otra dotación de policías locales se traslada a comisaría de Policía Nacional para entrevistarse con la madre, que denunciará la agresión y será trasladada a ser atendida por los servicios sanitarios.
Mientras tanto el hijo de la pareja, menor de edad, se queda en custodia de una patrulla de la Policía Local hasta la llegada de la madre, y se procedió, a su vez, a la detención del padre, de 70 años, como presunto autor de un delito de violencia de género, quedando reflejado en las diligencias al juzgado la mutua agresión de la pareja.
El pasado miércoles, agentes de la Policía Local en colaboración con agentes de la Policía Nacional detuvieron a un varón de 34 años por la presunta comisión de un delito de violencia de género.
Los hechos tuvieron lugar en el domicilio de la pareja donde hubo una acalorada discusión que terminó con un golpe en el rostro propinado por el varón. Lo ocurrido fue confirmado por las versiones dadas por las dos partes, con lo que los agentes actuantes procedieron a la detención del agresor mientras solicitaban la colaboración de la Trabajadora Social del Ayuntamiento de Burgos (SUS) para el acompañamiento y ayuda de la víctima, que residía en otro domicilio.
Ese mismo día la Policía Local recibió una llamada al 092 en donde se informaba de una agresión entre una madre y una hija en un piso. A la llegada de dos dotaciones policiales, encontraron en las escaleras del edificio a una mujer que manifestaba haber discutido con su madre.
En el trascurso de la intervención, los agentes se entrevistaron con la agredida, que a simple vista presentaba varias erosiones en el rostro de las que acusaba a su hija. Cabe destacar que el día anterior los mismos agentes de la Policía Local intervinieron en otra disputa entre las dos mujeres sin que se hubiera dado el caso de una agresión física, siendo informado de ello la Unidad de la Gestión de la Diversidad/VioGén y el SUS (trabajador social) municipal. Por todo lo anterior, y ante las lesiones que presentaba, junto a lo manifestado por ambas partes, los agentes procedieron a la detención de la hija, de 43 años de edad, por la presunta comisión de un delito de malos tratos en el ámbito familiar.