Los agricultores de Lleida reclaman ayudas inmediatas por la sequía para evitar “una muerte anunciada”

ACN

Barcelona —

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La manifestación del sector agrario de Lleida ha llegado a Barcelona este miércoles con centenares de campesinos afectados por el cierre del canal de Urgell y el de Segarra-Garrigues, un mes después de que se implementara como restricción para combatir la sequía. El presidente del Govern, Pere Aragonès, y la consellera d’Acció Climàtica, Teresa Jordà, han recibido a los movilizados, quienes han trasladado las graves consecuencias de limitar el agua de las cosechas.

Los manifestantes exigen ayudas inmediatas por el cierre de los canales y una mejor gestión del agua a las administraciones ante la sequía. Además, entregarán una caja de manzanas a los políticos, como símbolo de las últimas que se cosecharon en los campos de Lleida el año pasado. 

El portavoz de la plataforma Manifest del Gran Urgell, Jaume Perera, ha avisado que el sector está ante una “muerte anunciada” si no se actúa rápidamente y exige “una solución de país”. Remarca que la falta de agua “no es solo un problema del sector agrícola”, sino que implica también a los ciudadanos o las industrias.

Perera ha recordado que Catalunya es autosuficiente en cuanto a producción de alimentos, pero que si se llega al peor de los escenarios de la sequía y desaparece buena parte del sector agrícola, esto se perderá. “Dependeremos de los alimentos que vengan de fuera, las multinacionales adquirirán nuestros campos, plantarán lo que quieran y marcarán los precios que les dé la gana”, reclama. “Lo notaréis en el súper, cuando queráis una barra de pan o un kilo de fruta”, añade. 

Marcha desde Lleida 

Las reservas al límite de los embalses de Rialb y Oliana y la falta de lluvias forzaron el cierre de los canales, una medida inédita en los 161 años de historia de la infraestructura. Esta ha obligado a los campesinos a buscar alternativas para intentar regar y salvar sus cosechas.

Ante esta situación de incertidumbre, los campesinos, así como los representantes de los principales sindicatos y cooperativas agrarias, crearon la Plataforma Manifest del Gran Urgell, que ha sido la responsable de esta multitudinaria manifestación en Barcelona.

Concretamente, los campesinos han salido desde Golmés (Lleida) en caravana y han hecho una primera parada en la plaza Sant Jaume, donde se ubica la sede del Govern, en Barcelona. 

La marcha quiere reivindicar sus demandas y concienciar a la población de la importancia de velar por el sector agrario. Así pues, la protesta también busca alertar a los ciudadanos que quedarse sin fruta o cereal de proximidad implica un aumento considerable de precios de los alimentos, que se tienen que comprar en otros países.