La portada de mañana
Acceder
El jefe de la Casa Real incentiva un nuevo perfil político de Felipe VI
Así queda el paquete fiscal: impuesto a la banca y prórroga a las energéticas
OPINIÓN | 'Siria ha dado a Netanyahu su imagen de victoria', por Aluf Benn

Barcelona municipaliza dos servicios de atención a mujeres y asume sus 55 trabajadoras

A partir del 1 de octubre, los Puntos de Información de Atención a las Mujeres (PIAD) y el Servicio de Atención, Recuperación y Acogida (SARA) pasarán a tener titularidad municipal por primera vez desde su creación. Las 55 trabajadoras de los dos servicios se incorporarán a la concejalía de Feminismos y LGTBI del Ayuntamiento de Barcelona.

“La atención especializada para casos de violencia machista debe ser considerada servicio de carácter esencial: no se puede dejar de prestar este servicio sin poner en riesgo el derecho de las mujeres a una vida libre de violencia”, ha destacado este viernes la concejala de Feminismos, Laura Pérez.

Los PIAD y el SARA son, junto a los Centros de Servicios Sociales (CSS), las puertas de entrada al circuito de prevención y atención de la violencia machista. El PIAD atiende las diferentes demandas de información sobre recursos, espacios de participación o asociacionismo que sean de interés para las mujeres y también las demandas por discriminación o violencia machista. El SARA atiende, de manera especializada, los casos de violencia machista.

Concretamente, se subrogarán 21 personas con contratos indefinidos que trabajan en los once PIAD de la ciudad, y las 34 personas (30 indefinidas y 4 interinas) del SARA. La concejala ha destacado que la incorporación de las trabajadoras permitirá al Ayuntamiento no sólo mejorar un servicio que ya era de “calidad” –según estadísticas municipales– sino también las condiciones laborales de las 55 plazas subrogadas.

A partir del 1 de octubre comenzará una negociación de las condiciones laborales de las trabajadoras para equiparar sus sueldos con los honorarios municipales y evitar así una doble escala de salarios en el área. La municipalización se suma a las 71 medidas presentadas por el Ayuntamiento hace unas semanas contra la feminización de la pobreza y la precariedad. Laura Pérez ha avanzado además que el Ayuntamiento trabaja en un aumento del personal de cara al 2017 de los servicios de atención a las mujeres recién municipalizados.

La medida permitirá combatir la “precarización”, según ha explicado la concejala de la CUP Barcelona, Maria Rovira, que sufrían las trabajadoras. La CUP ha sido la formación que ha empujado al consistorio a tirar adelante esta medida de gobierno: la gestión directa de los dos servicios de atención a las mujeres formaba parte de las  10 exigencias de la CUP para votar a favor de la modificación de crédito de BComú, los presupuestos de 2016.

A la espera de más municipalizaciones

“Este es un paso adelante muy importante para revertir las dinámicas externalizadoras”, ha añadido Laura Pérez. “Este debe ser sólo el inicio de las municipalizaciones”, le ha contestado durante la comparecencia de este viernes, en tono amable, Maria Rovira. La cupaire ha recordado el que debe ser, según Rovira, el objetivo de BComú: la municipalización de servicios.

Este ha sido el caso de los PIAD y del SARA, dos servicios que se crearon hace más de diez años: primero como prueba piloto, luego con una gestión directa mediante contratación externa. Laura Pérez ha explicado que ha sido un trabajo “complejo y de meses” la municipalización de dichos servicios.

La CUP no es la única que ha empujado al gobierno de Ada Colau a municipalizar servicios externalizados en los últimos años. Este lunes, tras una Mesa General de Negociación en el Ayuntamiento, los Sindicatos CCOO y UGT pidieron a la alcaldesa que prosiguiera, precisamente, en la municipalización del servicio de atención a las mujeres, la medida anunciada este viernes.

Este pero no es el único proyecto de municipalización en el que trabaja el Ayuntamiento: 31 educadoras de tres guarderías externalizadas –abiertas durante el pasado mandato– ya han firmado con el consistorio. También se trabaja con BTV desde hace semanas, tras las demandas favorables de los trabajadores externalizados. El objetivo de Colau es internalizar 1.200 plazas antes del final de su mandato.