Tanquem els CIE ha presentado este viernes una queja formal para que el juez de control del Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE) de la Zona Franca de Barcelona investigue los malos tratos que denunciaron los internos por parte de agentes de la Policía tras el conato de motín de este martes
En el escrito al juzgado, al que ha tenido acceso este diario, la plataforma solicita al juzgado que recabe todas las imágenes que grabaron la intervención policial en el CIE entre las 22:30 del 1 de noviembre y las 2:30 del 2 de noviembre. El objetivo es identificar si, tal y como han trasladado a Tanquem els CIE algunos internos, la Policía cometió “actuaciones irregulares o delictivas”. En concreto, los internos aseguran que algunos agentes de la Policía Nacionales les agredieron con porras “sin que mediara justificación alguna” en las escaleras que dan acceso al primer piso del centro.
“Por las descripciones –añade Tanquem els CIE– parece que eran agentes antidisturbios los que golpeaban a los internos mientras pasaban custodiados en lo que se configuró como un pasillo de policías”. Además, la plataforma también traslada que algunos internos aseguraron ser agredidos al llegar a sus celdas. Para esclarecer los hechos, la entidad ha pedido al juzgado que tome declaración a los internos que denunciaron las posibles agresiones y que solicite los partes médicos de los mismos.
Uno de los dos titulares de los juzgados de control del CIE, que se reparten los magistrados del juzgado de instrucción 1 y 30 de Barcelona, decidirá en los próximos días si accede a la petición de plataforma.
Tras las entrevistas que Tanquem els CIE ha tenido con ocho internos, la entidad ha llegado a la conclusión de que existen indicios de que en el momento en que entraron los agentes antidisturbios para sofocar la protesta, el grupo de 70 internos levantaban las manos en señal de que el motín había terminado. Asimismo, Tanquem els CIE señala que, mientras los internos eran trasladados a sus celdas desde el patio, se apagaron las luces, algo que la entidad ve “disfuncional”.
La entidad también ha indentificado otras dos situaciones irregulares. Por un lado, la falta de traductores en el momento de la intervención policial. Para Tanquem els CIE, esto “pudo llevar a que las personas que no entendían el idioma, y por tanto, las órdenes, fueron más agredidas que el resto”. Asimismo, en los días posteriores al motín, la plataforma ha detectado una “fuerte” presencia de antidisturbios en el CIE, sin que su intervención esté prevista en el reglamento que regula el régimen de estos centros.
Por ello, la entidad solicita, por un lado, que el juzgado ordene asegurar la presencia de traductores en el CIE. Además, pide que el magistrado prohíba las entradas de antidisturbios en el CIE “salvo en situaciones altamente excepcionales que deben ser especificadas”.