El Área Metropolitana de Barcelona (AMB), ente presidido por la alcaldesa de la capital catalana, Ada Colau, no irá más allá de la Generalitat en su decreto para regular Uber y Cabify. El organismo ve “insuficiente” el tiempo de reserva de 15 minutos que el Govern va a fijar para los vehículos con licencia VTC, pero no lo ampliará, porque asegura que si lo hace, se lo podrían tumbar en los juzgados.
El conseller de Territorio y Sostenibilidad, Damià Calvet, ha asegurado este viernes que el tiempo de precontratación de 15 minutos es un mínimo y que las administraciones locales, sobre todo la AMB -que está desarrollando su propio reglamento-, lo pueden aumentar. Pero desde el organismo presidido por Colau interpretan que se les está traspasando su “responsabilidad”.
En un comunicado, el organismo (que aglutina a 36 municipios de la zona metropolitana) considera “impropia” la actitud del Govern. Además de considerar, como los taxistas, que los 15 minutos son insuficientes, también alerta que será “imposible de controlar” y que no acaba a la práctica con la “competencia” que los vehículos de Uber y Cabify hacen al sector del taxi.
El organismo presidido por Colau se encuentra en la actualidad en un período de elaboración de un reglamento propio para poner condiciones a la actividad de Uber y Cabify, en el que preveía satisfacer las peticiones de los taxistas y fijar un tiempo mínimo de reserva de entre seis y doce horas. Con el nuevo decreto del Govern, abandonarían esta idea alegando inseguridad jurídica.
Al conocer el contenido del decreto, los taxistas han anunciado una huelga indefinida y una acampada en la Gran Via de Barcelona, tal como hicieron durante una semana entera en verano pasado.