La mesa del Parlament de Catalunya vulneró los derechos del PSC cuando permitió que el pleno rechazara nombre de Miquel Iceta como senador de designación autonómica, en mayo de 2019. Así lo recoge la sentencia dictada este miércoles por el Tribunal Constitucional y que da respuesta al recurso de amparo reclamado por el grupo político después del episodio, que supuso que el entonces líder socialista no pudiera acceder a la Cámara Alta, de la que tenía previsto convertirse en presidente con los votos del PSOE.
El magistado Juan Antonio Xiol ha sido el ponente de un fallo que da la razón a los recurrentes, que alegaban que el problema residió en el tipo de votación utilizada. La mesa impuso una elección electrónica, en la que se ofrecía el nombre de Iceta y los diputados podían votar sí, no o abstenerse. La mayoría independentista votó en contra. En cambio, de utilizar el método de las papeletas, los diputados solo hubieran podido escribir el nombre de los posibles candidatos. Como en esta ocasión solo se presentaba Iceta, el hoy ministro de Cultura hubiera sido elegido con toda seguridad.
Así el fallo entiende que “dadas las circunstancias específicas del caso”, la utilización del sistema de votación electrónica pudo “bloquear” la designación, lo que iba en contra del derecho fundamental a la participación política que asistía al grupo socialista. Los jueces entienden que una votación por papeleta, en cambio, hubiera sido respetuosa con ese derecho.
“La Mesa debió optar por un procedimiento de votación que, sin restringir la facultad de la Asamblea de votar o no por el candidato propuesto, elegible por mayoría simple, impidiera que pudiera constituirse una mayoría de bloqueo amparada en la posibilidad de formular un voto negativo sin alternativa alguna”, aseguran.
El episodio que ahora se resuelve en el Constitucional se inició en mayo de 2019, cuando tras las elecciones el PSOE contó con mayoría en el Senado y debía elegir la nueva mesa de la Cámara. El entonces presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, eligió a Iceta para hacerse con las riendas de la presidencia, para lo cuál se ideó un recambio que suponía que el expresident y senador por designación autonómica José Montilla dejase su escaño y entrarse en relevo Iceta. Sin embargo el Parlament abortó ese movimiento cuando la mayoría de la Cámara votó contra el jefe del PSC e impidió que se convirtiese en senador. Los socialistas denunciaron entonces una vulneración de derechos que ahora el TC confirma.