Un grupo de personas destrozó este jueves el centro de menores migrantes de Torredembarra e hirió a dos de los residentes, uno de ellos de gravedad. Los hechos ocurrieron después de una manifestación vecinal que reclamaba más seguridad a raíz de varios delitos cometidos por unos jóvenes mayores de edad que viven en una casa ocupada. Posteriormente a la concentración un grupo fue por libre a buscar algunos de los ocupas y habría terminado agrediendo a un residente del centro donde viven menores migrantes no acompañados de la localidad. El herido se encuentra ingresado en el hospital Santa Tecla de Tarragona con la nariz rota. También se dirigieron al centro de menores titularidad de la Generalitat y causaron destrozos antes de entrar y atemorizar a los residentes.
Unos pocos cientos de personas se concentraron ayer por la tarde en Torredembarra para reclamar más seguridad en la zona cercana a una casa ocupada en la calle de las Mimoses. Los ocupas, mayores de edad, preocupan a los vecinos y desde el pasado julio los Mossos y la Policía Local de Torredembarra han hecho hasta once detenciones, principalmente por robos con fuerza en viviendas y en vehículos, pero también por resistencia y desobediencia a la autoridad y hurto.
Según informaron fuentes de los Mossos, la concentración transcurrió sin incidentes, pero posteriormente un grupo de ochenta personas se desplazó a la calle Mimoses con la intención, presuntamente, de echar a los jóvenes de la vivienda ocupada. Según ha apuntado el consistorio en un comunicado, los manifestantes profirieron “insultos racistas y amenazas”, pero una línea policial les cerró el paso.
Posteriormente, un grupo de personas que protestaban en este lugar se marcharon del lugar hacia el entorno del parque de Cal Llovet y agredieron a un chico de 18 años que reside en un centro de menores que la Generalitat tiene en el municipio. El joven logró refugiarse en un bazar chino cercano y, aunque los atacantes insistieron al propietario del local que le dejaran salir, finalmente una patrulla de la Policía Local hizo bajar la persiana del negocio y evitar males mayores. El Ayuntamiento ha apuntado que dos menores tuvieron que refugiarse en la biblioteca Mestra Maria Antònia.
Según la versión de los Mossos, este grupo de personas volvieron de nuevo a la calle Mimoses para intentar entrar en el piso ocupado, pero no lo consiguieron. Mientras tanto, otro grupo de media docena de personas –según testigos presenciales, simpatizantes de la extrema derecha–, asaltaron un centro de menores, rompieron los cristales de la puerta de acceso y de las ventanas, y dañaron mobiliario del interior. Según la versión del consistorio, fueron unas cincuenta las personas que acudieron al centro. Los residentes se tuvieron que refugiar en las habitaciones hasta la llegada de la policía.
Los Mossos han abierto una investigación para identificar el grupo que agredió a los menores y que protagonizó los daños en el centro residencial.
El propietario tapia la entrada de la casa
Este viernes por la mañana el propietario de la casa de la calle de las Mimoses ha tapiado la entrada del inmueble, así como las ventanas, “aprovechando que los jóvenes se encuentran fuera del municipio”, según ha informado el Ayuntamiento.
El consistorio también ha “lamentado y condenado los hechos violentos”, que “tuvieron lugar con posterioridad” a lo que, señala, era una “legítima concentración”. El Ayuntamiento ha mostrado “su preocupación por la gravedad de los hechos sucedidos” y ha hecho “un llamamiento a la tranquilidad”. “Para evitar más disturbios, se ha reforzado el servicio de Policía Local y Mossos. La violencia y la xenofobia no se pueden tolerar y nunca, nunca, son el camino ni la solución”, agrega la nota.
Condena de los hechos por parte de Asuntos Sociales
Paralelamente, el Departamento de Asuntos Sociales de la Generalitat ha emitido también un comunicado en el que “condena la agresión que sufrieron anoche dos chicos residentes en el centro de menores de Torredembarra, uno de ellos con heridas graves, así como el ataque que ha provocado importantes destrozos en el centro ”.
El Departamento “califica el ataque de muy grave y quiere recordar que los centros de protección de menores son servicios públicos que acogen a las personas más vulnerables de nuestra sociedad: menores de edad sin referentes familiares, en situación de vulnerabilidad social”. “Es inaceptable que haya quien quiera focalizar el odio hacia las personas que más deberíamos proteger”, añade la nota.
Asuntos Sociales ha reiterado “su rechazo frontal a estas actitudes violentas en los espacios donde viven los menores bajo la tutela de la administración” y ha anunciado “que, como ha hecho en las otras ocasiones, ya ha puesto en marcha su equipo jurídico para denunciar estos hechos ”.