La regla y los Gelokitties

Estoy un poco cansada de interpretaciones entorno mi querida menstruación.

Hay reglas que me hacen daño, sí, y sólo quiero espachurrarme en el sofá, retorcerme, despotricar, maldecir y tomar medicinas para que me pase el dolor. Y no quiero que nadie haga conjeturas sobre si tengo quistes en los ovarios, infertilidad potencial, problemas con mi madre, contradicciones con mi sexualidad o que me digan que tengo que parir para que se me agrande el cuello del útero, que me diga que analice conflictos interiores o que es porque he nacido en primavera y las que nacemos en primavera somos más propensas a los dolores menstruales. No quiero recomendaciones para que haga yoga o danza del vientre, de que respire conscientemente, abrace mi dolor y lo atraviese ... o de que relaje el útero con meditaciones guiadas y me reconcilie con mis ovarios con una visualización de luces de colores.

Me gustaría que me tapasen con una manta, que me preguntara si se me lleva una infusión calentita y me dejara en paz con mis pinchazos o con lo que sea que sienta. Y que en todo caso, se me preguntasen, en que te puedo ayudar? Y te diré que necesito. Puede ser silencio, puede que me cuentes algo para distraer mi cabeza, puede que me pongas la mano encima de la barriga y me digas que “todo irá bien”. En cada momento me puede valer una cosa u otra, ya te lo diré, pero no t'adelantes diagnosticarme.

El cicle menstrual dibuixat per Alejandra Lunik

Estoy cansada de escuchar personas que se llaman “expertas de la regla” juzgar todas las reglas por igual; tener soluciones maravillosas para mi regla en concreto, porque saben exactamente cómo me siento; invitarme a beberme mi sangre o quererme clavar agujas en no sé dónde porque me pase el dolor. Y lo que más rabia me da es que me critiquen porque tomo paracetamol. Tomo Gelocatil, sí, lo admito. Me gusta decirle Gelokitty, a pesar de haberme pasado al Dolocatil que es más barato. Tomo paracetamol porque hay reglas en que no quiero analizar mi dolor, hacer reflexiones ancestrales ni ningún remedio de Dios. Quiero que se me pase, y pronto. Y quiero sentirme libre de poderme medicar. Porque no quiero quedarme tirada en el sofá, porque quiero ir a trabajar, porque he quedado con alguien que hace tiempo que no veo y quiero verla ... porque no tengo que dar explicaciones, y aunque quizá sería más sano detenerme, tomar la baja, o anular el encuentro con una amiga, a veces me apetece tomar un medicamento para sentirme un poco mejor y sentirme libre de poder decidir qué hago.

Parece que hay varias metas a alcanzar en torno a la regla, ya veréis que me quedo corta:

-La Regla no existe. Si la tienes, escondela.

-Amedrentar las parejas para que no tengan relaciones sexuales con la regla como compañera.

-combatirla con compresas y tampones con tecnologías avanzadas Odor Control.

-convencer a la población que la sangre menstrual es azul.

-Entender que lo más importante es que no te haga daño y puedas practicar mucho deporte e ir a la playa.

-Saber que la clave es que tú ejerzas control sobre ella para decirle cómo tiene que ser, como te ha de tratar y las molestias que te ha de causar.

Sembla que hi ha un cicle menstrual que ho explica tot, unes hormones que ho confirmen i uns estudis que ho corroboren. Bla, bla, bla… Sembla que has d’estar excitada en període fèrtil, tenir totes les aventures possibles per corroborar la teva agilitat en els dies que et ve a visitar “la mujer de rojo” i portar la faldilla més curta per demostrar confiança públicament. Sembla que t’has de posar espongetes a la vagina per poder tenir relacions de penetració i aturar la regla perquè el xicot no s’embruti el pito… Bla, bla, bla…

Parece que hay un ciclo menstrual que lo explica todo, unas hormonas que lo confirman y unos estudios que lo corroboran. Bla, bla, bla ... Parece que tienes que estar excitada en periodo fértil, tener todas las aventuras posibles para corroborar tu agilidad en los días que te viene a visitar “la mujer de rojo” y llevar la falda más corta para demostrar confianza públicamente. Parece que tienes que ponerte esponjitas en la vagina para poder tener relaciones de penetración y detener la regla para que el novio no se ensucie el pito ... Bla, bla, bla ...

Mi dismenorrea como la han llamado no me visita todos los meses, tiene sus propios horarios y deseos, y no se debe a endometriosis, miomas, cánceres, dispositivos intrauterinos, ITS ... ni nada de eso. Me duele porque estoy estresada? Puede ser sí. Ser mujer es estresante. Me estreso entre otras cosas cuando siento que no puedo menstruar en paz, que este momento íntimo es ecografiado, descodificado, psicoanalizado y evaluado con varias lupas ... la de “otra vez con dolor de regla?”, “Ya has ido al médico , no ”?,“ ¿Seguro que no te ocurre nada en el inconsciente? ”¿Te has fijado que con luna llena todo es diferente “... Y una mierda!

Sinceramente, no me importa. Es verdad que no me gusta sentirme hinchada e ir con los pantalones desabrochados por todas partes, ni manchar el suelo cuando me cambio la copa menstrual, ni enrojecer toallas cuando me ducho o notar que ya no me quedan fuerzas y que me he de quedar en la cama, pero lectoras y lectores, si es que habeis llegado hasta aquí y os ha pasado también por la cabeza la frase “Si tienes la regla, es que estás viva” o “Ya la echarás de menos cuando no la tengas”. No sufráis, amo mucho mi regla, no la cambiaría por ninguna otra, e incluso he puesto nombre a mis ovarios para dirigirme a ellos con educación o sin, según la fase de la luna que me rija ..., y no, no tengo histeria, ni traumas. Bla, bla, bla ... Mirad que dibujo tan bonito he hecho!